Interés por sembrar en tierras militares

Las dos primeras licitaciones para sembrar en campos de las Fuerzas Armadas despertaron el interés de dos de los principales grupos de siembra del país.

Vuelven a sembrar en tierras militares.

Vuelven a sembrar en tierras militares.

23deAgostode2016a las08:41

Las dos primeras licitaciones para sembrar en campos de las Fuerzas Armadas despertaron el interés de dos de los principales grupos de siembra del país. Ambos presentaron las mejores ofertas para producir en más del 90% de las tierras que se licitaron para soja (más de 4000 hectáreas) en un campo del Ejército en Córdoba, según pudo saber LA NACION de fuentes del mercado.

Esos dos grupos son Cresud y MSU. La primera empresa, ligada a IRSA, de la familia Elsztain, sembró en la campaña pasada en la Argentina 211.776 hectáreas. Mientras tanto, la segunda firma, de la familia Uribelarrea, trabaja más de 150.000 hectáreas.

A través de la Agencia de Administración de Bienes del Estado, organismo en la órbita de la Jefatura de Gabinete de la Nación que controla los bienes del Estado, el Gobierno abrió dos licitaciones para sembrar 9806 hectáreas propiedad del Ejército en el establecimiento General Paz, en Ordóñez, Córdoba, entre soja y maíz de la nueva campaña, con opción para una campaña más.

De todo lo licitado, hubo ofertas para ese campo del Ejército por 7096 hectáreas, el 72% del total, entre soja y maíz. En plata, el monto licitado representa más de 48 millones de pesos, dinero que recibirá el Estado por este proceso.

Rompió el modelo K

El gobierno de Mauricio Macri rompió el modelo que había impuesto el kirchnerismo para las tierras de las Fuerzas Armadas. En rigor, tras un proceso donde antes las tierras se daban también en alquiler, en 2013 el Ministerio de Defensa y el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) firmaron un acuerdo para que las tierras de las Fuerzas Armadas sean producidas por el mismo Estado. Así, por ejemplo, en la campaña 2013/2014 el anterior gobierno llevó adelante la siembra de 18.639 hectáreas en campos de las Fuerzas Armadas en Buenos Aires, Córdoba y Entre Ríos. Para la campaña 2014/2015 pasó a un plan de 24.060 hectáreas, con apoyo en la gestión y la administración de una empresa vinculada con el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA).