La comunicación en sanidad va por más

“Propiciamos la creación del Foro para que la sanidad sea reconocida como una herramienta clave para mejorar la productividad de los rodeos, produciendo alimentos saludables e inocuos para el mercado interno y externo. Desde este espacio estamos trabajando en la elaboración de mensajes consensuados, simples, basados en las investigaciones existentes, para transmitir los beneficios de aplicar planes sanitarios de la  mano del veterinario”, dijo el Dr. Juan Carlos Aba, Presidente de Cámara de Productos Veterinarios (Caprove).

El Foro de Sanidad Bovina, que se formó recientemente, es un espacio en el que interactúan diversas instituciones públicas y privadas. Participan el Ministerio de Agroindustria de la Nación, Senasa, Inta, el Ministerio de Agroindustria de Buenos Aires, la Facultad de Veterinaria de Unicen, los Colegios de Veterinarios de Buenos Aires y Santa Fe, la Federación Veterinaria Argentina y los laboratorios asociados a Caprove.

La raíz del problema

Para el Dr. Mario Carpi, de Olavarría, quien integra el Foro en representación de la Coordinadora de Colegios Veterinarios de la Argentina, “la sanidad bovina está devaluada frente al aporte de la genética, la nutrición y el manejo por el  falso criterio de que los problemas sanitarios están solucionados. En realidad nuestros rodeos no expresan todo su potencial fundamentalmente por enfermedades subclínicas y crónicas, entre otras, que hacen que de 100 vacas, logremos poco más de 60 terneros, como promedio nacional, en lugar de los 80/85 posibles”, planteó.

En la visión del especialista, incluso, “a la hora de planear el aumento de la producción, sean iniciativas privadas u oficiales, lo primero que se piensa es que hay que mejorar esas tres herramientas. La sanidad queda en segundo plano, cuando debería estar al mismo nivel que las otras”. Otro problema es que “las tareas sanitarias se ajustan a rutinas que no siempre cubren las necesidades del rodeo. Desde el Foro tendremos que difundir que se debe cumplir con lo básico y además hacer un diagnóstico del establecimiento para aplicar planes acordes”, propuso.

En ese sentido, Carpi advirtió que “más allá de los avances logrados con los nuevos sistemas de cría, recría y engorde, debemos ser conscientes de que en cada aumento de la intensificación incorporamos mayores riesgos sanitarios tales como carencias minerales, avitaminosis y resistencia a fármacos por uso indebido. Y todo esto debe ser evaluado por el veterinario”. Al respecto, precisó que “la moderna ganadería implica una tarea cada vez más artesanal, viendo la realidad del animal y cómo se trabaja in situ”.