La Presidenta ordenó a Capitanich reducir sus encuentros con la prensa
Luego de las idas y venidas que dejaron al descubierto desinteligencias entre los ministros, se dispuso que el funcionario sólo responda tres preguntas por día.
Después de una semana errática en la comunicación oficial, el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, autor e ideólogo de la nueva política, debió acotar sus exposiciones públicas y por orden de Cristina Kirchner anunció que hablará menos y sólo admitirá tres preguntas en sus conferencias diarias.
La Presidenta lo hizo cambiar de táctica después de las idas y venidas oficiales que dejaron al Gobierno envuelto en desinteligencias y disputas internas dentro del gabinete nacional.
"Quería proponerles un sistema donde tengamos conferencias de prensa en general cortas, con rotación de tres preguntas por día y que no se repitan", anunció Capitanich, en tono amable, en su encuentro con la prensa por la mañana.
La marcha atrás en su estilo de comunicación fue una decisión de Cristina Kirchner, según contaron fuentes oficiales a LA NACION, para evitar que queden expuestas las diferencias entre sus funcionarios.
El jefe de Gabinete ya había acotado sus intervenciones después de que el ministro de Economía, Axel Kicillof, los desautorizó tanto a él como al titular de la AFIP, Ricardo Echegaray, por los cambios en el cobro del impuesto a los bienes personales.
Tras una semana de contramarchas, incluso con el debate por la importación o no de tomates ante una posible escasez, la jefa del Estado retomó el manejo comunicacional, que por ahora mantendrá las conferencias de la mañana, aunque acotadas a los temas que proponga el ministro coordinador.
La orden de Cristina Kirchner es que Capitanich hable sólo de la gestión, sin hacer comentarios sobre las declaraciones que hagan otros funcionarios.
El jefe de Gabinete ya lo puso en práctica la semana pasada, cuando se ciñó a la desmentida de Kicillof y evitó dar mayores precisiones cuando el viernes le preguntaron por las denuncias contra los medios del secretario general de la Presidencia, Oscar Parrilli.
La nueva política comunicacional propuesta por Capitanich duró poco. Desde que asumió, mantuvo sus contactos diarios con la prensa por más de 45 minutos, pero, tras la orden presidencial, ya el viernes sólo admitió una consulta y se retiró.