Aceite de girasol alto oleico, con potencia de negocio

El aceite de girasol alto oleico, se trata de una especiality que viene ganando participación a nivel productivo en el país en los últimos tiempos.

Fuente: BCR

Fuente: BCR

14deAgostode2014a las07:25

El Código Alimentario Argentino (CAA) define al aceite de girasol alto oleico como aquel cuyo contenido de ácido oleico es igual o mayor al 75%, sobre el total de ácidos grasos. El mismo es una variante del aceite convencional obtenido a partir del procesamiento de una semilla genéticamente modificada (híbrido), que prioriza el contenido de ácido oleico, en lugar del linoleico.

Este tipo de aceite posee gran calidad nutritiva, culinaria e industrial, en especial porque su menor probabilidad de auto-oxidación le otorga una mayor estabilidad sin necesidad de hidrogenación, logrando un producto más sano y que puede ser conservado por más tiempo. En términos generales, el aceite de girasol alto oleico es similar al de oliva, con la ventaja adicional de que posee un sabor y olor neutros. Además, el rendimiento de la semilla híbrida y la producción son comparables a los cultivos de girasol tradicionales. Este producto tiene una amplia gama de destinos posibles, entre ellos se destaca el uso para alimentos, cosmeticos y productos industriales, como lubricante.

Asimismo, también presenta ciertas ventajas desde el  punto de vista productivo y comercial ya que es un producto de mayor valor que el aceite convencional, porque se comercializa como especiality, pudiendo obtenerse rendimiento y volumen similares a la commodity en cosecha. Ademas promueve la asociación de productores, el cooperativismo y la integración vertical para la producción y posterior procesamiento y comercialización. Tambien se destaca porque incrementa el valor de la tierra, al ser capaz de producirse en zonas marginales menos aptas para otras producciones[iii], como la región del NEA.