Más avances en inoculación de soja
En Pergamino desarrollaron un nuevo tipo, que tiene en cuenta las particularidades de cada zona, para desarrollar productos específicos.
La idea del nuevo desarrollo es, justamente, ayudar a incrementar los rindes, en un momento del agro en que eso resulta más necesario que nunca.
La inoculación ha sido una práctica ampliamente incorporada en Argentina, porque demostró que permitió incrementar los rindes en los cultivos de manera significativa y sustentable.
Un solo microorganismo fijador de nitrógeno
Actualmente, en nuestro país todos los inoculantes para soja utilizan en su formulación un solo microorganismo fijador de nitrógeno: Bradyrhizobium japonicum cepa 109. En algunos casos también se han utilizado combinaciones de cepas genéricamente recomendadas, que son de adaptación general para todos los ambientes y que han tenido una performance aceptable.
Sin embargo, la importancia del cultivo de soja justificó profundizar la investigación para aumentar, vía la Fijación Biológica de Nitrógeno (FBN), los rendimientos a campo.
En este marco, nuestra compañía desarrolló una investigación basada en un supuesto bien conocido por el productor agropecuario: que si bien los productos con adaptación general pueden dar buenos resultados, es poco probable que logren resultados superiores a aquellos productos desarrollados específicamente para cada zona. Por ejemplo, el maíz, el trigo o la soja no tienen un único material para todo el país. Por el contrario, la especificidad es regla.