La implantación, el primer paso del rendimiento
El éxito de la siembra de trigo no sólo depende del poder germinativo de la semilla, sino también de su calidad fitosanitaria. Resulta determinante el uso correcto del curasemillas. Kava® de Rotam es la herramienta.
En el cultivo de trigo la clave es la correcta elección de la semilla y su implantación.
La clave del cultivo de trigo comienza por la correcta elección de la semilla, su ciclo, su calidad de siembra y la correcta cantidad de plantas obtenidas por metro cuadrado, de manera que, luego de la etapa de macollaje, se pueda contar con una óptima cantidad de espigas por metro cuadrado. Este es el principal componente del rendimiento ya que actúa directamente sobre la cantidad potencial de granos por metro cuadrado cosechado.
El inicio de todo este ciclo es a partir de una semilla de alto poder germinativo y vigor, pero esto de nada sirve si el curasemilla no tiene las características para protegerla de agentes patógenos o bien del complejo de insectos y gusanos de suelo.