Por falta de rentabilidad, queda el 30% de la caña sin cosechar

Todo se demora por una sencilla razón: cortar la caña y llevarla a los ingenios implica perder mucha plata.

¿Será posible que un país que se enorgullece de producir alimentos para 400 millones de personas resigne casi 400 mil toneladas de azúcar?

¿Será posible que un país que se enorgullece de producir alimentos para 400 millones de personas resigne casi 400 mil toneladas de azúcar?

18deAgostode2015a las08:32

Los altos cañaverales tan típicos de Tucumán lucen erguidos y amenazantes. A esta altura del año, en un año normal, las cosechadoras a motor y los cosecheros a machete habrían derribado más de la mitad de esa espesura, pero esta vez el avance de esa tarea viene muy lento y apenas superó el 30% de las 270 mil hectáreas implantadas. Todo se demora por una sencilla razón: cortar la caña y llevarla a los ingenios implica perder mucha plata, más de 4.000 pesos por hectárea. Ante semejante quebranto los productores coinciden: quedará sin cosechar de 30 a 40% en la principal región azucarera de la Argentina.

¿Será posible que un país que se enorgullece de producir alimentos para 400 millones de personas resigne casi 400 mil toneladas de azúcar? Todo parece posible en este Tucumán modelo 2015, que desde hace una semana tiene a muchos de sus productores agropecuarios cortando las rutas y acampando en la plaza central de la capital, frente a la casa de gobierno. Uno de ellos le dice a Clarín que la situación le hace acordar a la gran crisis azucarera de mediados de los sesenta, cuando quebraron 11 ingenios. “Este año cinco fábricas pueden entrar en convocatoria. Pero lo más grave es que 4.000 pequeños cañeros corren serio peligro de desaparecer”, afirma exaltado.