2015: “Un año para pensar con el estómago más que con la cabeza”

Reflexionó Teo Zorraquín sobre el contexto actual del país aunque admitió ser optimista si se piensa a largo plazo de cara a las elecciones presidenciales de octubre.

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Teo Zorraquín, Consultor en Agronegocios Zorraquín + Meneses. Foto de archivo.

Teo Zorraquín, Consultor en Agronegocios Zorraquín + Meneses. Foto de archivo.

21deSeptiembrede2015a las12:50

“Si uno hace las cuentas y es un ser racional completamente, tendría que hacer las valijas e irse del país”, manifestó Teo Zorraquín, Consultor en Agronegocios Zorraquín + Meneses, en entrevista exclusiva con fyo, y agregó: “Si bien no hay ninguna foto actual del contexto político y económico del país que estimule demasiado, estamos en un año de elecciones y eso ya dice mucho”.

De acuerdo a los dichos del consultor, quien disertó en el Bloque Coyuntural del 6to encuentro de Agromanagement organizado por Barrero & Larroudé, este año está traccionado por algún tipo de esperanza o sueño de cambio, ya que la posibilidad de cambio de autoridades a partir del mes de diciembre, renueva las ilusiones.

En este sentido, Zorraquín expresó: “Si este año me guío sólo por la razón, tomo la decisión y alquilo un campo y siembro, cuando hago la cuenta el resultado es cero en el Excel, y eso es mucho”, sostuvo, al momento que agregaba: “Ahora, si pienso que va a venir alguien, va a tomar cartas en el asunto, plantea que la producción de alimentos es estratégica para nuestro país y da señales de cambio, la realidad es otra”.

En pocas palabras, “con ciertas medidas de corto plazo y algunas esperanzas de largo plazo, esto podría dejar de ser un ciclo muy malo y podrían pasar a ser un ciclo medianamente bueno. Lo claro es que hoy tracciona mucho más lo no racional que lo racional”, explicó.

¿Cómo ser optimistas en un contexto poco amigable?

Frente a este interrogante Teo fue categórico: “El actual contexto, tanto nacional como internacional, es muy poco amigable. Desfasajes en la economía, actos de inconstitucionalidad, presión tributaria, devaluación en Brasil, crisis de China, abundantes stocks, se combinan para hacer de la coyuntura una tormenta perfecta”.