Langosta: controles para disminuir daños en los cultivos

Es una plaga voraz que amenaza a los cultivos, campos de pastoreo y montes naturales de distintos sectores productivos del país. El rol del Senasa, cómo controlarla, evitar sus daños y características.

07deOctubrede2016a las09:22

Introducción

La langosta es una plaga voraz que amenaza a los cultivos, campos de pastoreo y montes naturales de distintos sectores productivos. Sus agrupamientos, llamados mangas, son capaces de consumir una cantidad de cultivos equivalentes al alimento que necesitan 2.500 personas en un día.

El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) estableció una red de monitoreo oficial que permite la identificación temprana de focos en estadios juveniles y el control en el momento oportuno, con el objetivo de disminuir su reproducción, evitar la dispersión, lograr una merma del nivel poblacional y mantener a la población de insectos en su hábitat natural.

El 29 de septiembre pasado, en la ciudad de Fernández, provincia de Santiago del Estero, se realizó una reunión encabezada por el Senasa y el Ministerio de Agroindustria de la Nación, en la cual se presentó un plan de trabajo para el control de la plaga de langosta durante la próxima temporada.

Este encuentro surgió a partir de la coordinación de las autoridades del Senasa y de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) para el abordaje de los programas de acridios –que incluye langosta y tucuras- y del picudo algodonero.

En este sentido, se resaltó el rol del productor, de denunciar su presencia. En los controles habrá una corresponsabilidad: los productores deberán actuar en sus campos y el Senasa en montes naturales o terrenos donde no haya presencia de agricultores.

Campaña 2015-2016

En el año 2015 hubo una explosión demográfica que llevó al Senasa a redoblar los esfuerzos en la tarea. Según explica la directora de Sanidad Vegetal del Organismo, Wilda Ramírez, "el nivel de precipitaciones y lo poco riguroso que fue el invierno pasado crearon las condiciones para que apareciera una tercera generación en el año, que aumentó exponencialmente la densidad poblacional". Y para dar una cabal dimensión del problema, grafica la profesional: "Se trata de los mayores niveles de reproducción y dispersión de la plaga en 60 años".