El tren de cargas y su efecto derrame
El impacto positivo del tren de cargas va desde el productor al consumidor, desde el campo hasta la minería.
|Tienen previsto terminar la línea Belgrano a fines del 2019, la cual va a unir Rosario con Salta, Jujuy y Tucumán.
El costo del flete y la falta de competitividad lideran el ranking de problemas de la actividad productiva y el tren de cargas se presenta como una posible solución.
En diálogo con Agrofy News, Ezequiel Lemos, presidente de Trenes Argentinos Cargas contó el avance de las obras y su impacto.
¿En qué líneas están trabajando?
La primer línea que recibió las inversiones y tiene el foco de nuestra atención es la línea Belgrano, la cual comunica el norte argentino con los puertos de Rosario. La prioridad la tuvo el norte porque es donde más necesidad de transporte tienen, están más alejados de los puertos de exportación y por ende, los costos de flete son elevados.
Todo eso hace que muchas zonas no sean productivas por no tener un flete competitivo, así que empezamos por allí. Son 1.600 kilómetros, es una obra de renovación que nos va a permitir tener un tren de clase mundial, que si bien no existe acá, en el mundo es algo de absoluta vigencia y ayuda a los países a moverse de modo competitivo. Ya llevamos 280 kilómetros hechos.
En marcha
“Venimos a un ritmo que como todo, tiene una curva de aprendizaje y todo esto es una obra faraónica. De la época de los ingleses que no se hacía este tipo de obra”, argumentó Lemos.
De acuerdo a la información proporcionada, los primeros 100 km se hicieron en doce meses; hoy ya agarraron ritmo y tardan dos meses y medio para realizar 100km. Tienen previsto terminar la línea Belgrano a fines del 2019, la cual va a unir Rosario con Salta, Jujuy y Tucumán.