Cristina, Guzmán y el FMI: la crisis argentina según el Financial Times
Para Martín Guzmán el desafío es convencer al FMI y al Club de París de la credibilidad de sus promesas, dado que sus esfuerzos para evitar un nuevo default son cascoteados por el ala dura del kirchnerismo
|Mientras el ministro de Economía argentino intenta convencer a los países ricos de posponer un pago de la deuda de u$s 2400 millones que vence el 30 de mayo, algunos inversores temen que sus intentos de evitar un nuevo default se vean frustrados por el accionar del ala interna del gobierno liderada por la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
Martín Guzmán, el ministro de Economía de 38 años, recorre esta semana varias capitales europeas junto al presidente Alberto Fernández para pedir a los miembros del Club de París que le permitan postergar el pago de su deuda.
Los inversores temen que sin un acuerdo amigable con el Club de París, podrían verse afectadas las negociaciones con el FMI.
Se creía que después de que haber acordado en agosto pasado una reestructuración de u$s 65.000 millones de deuda privada, Argentina iba a negociar nuevos términos para el reembolso para los u$s 44.000 millones que el FMI le prestó desde 2018.
Pero ahora, los funcionarios del FMI creen que no llegarán a ningún acuerdo con Argentina hasta después de las elecciones de mitad de período en octubre, porque se empiezan a notar los instintos populistas del gobierno peronista de aumentar el gasto antes de la votación.
El ímpetu por gastar crece a medida que una nueva ola de contagios de Covid-19 golpea a Argentina, donde la pobreza aumentó de 26% a 42% tras una recesión que lleva tres años. Esto hace que sea poco probable que el país alcance el tipo de consolidación fiscal que seguramente exigiría cualquier acuerdo con el FMI.
Las posibilidades de éxito del gobierno peligran a raíz de las repetidas maniobras que hace la facción kirchnerista leal a la vicepresidenta -que también fue presidenta-, para obstaculizar los intentos de Guzmán de lograr incluso una modesta consolidación fiscal.