Para volver a sembrar: ¿Conviene vender 1000 toneladas de soja o tomar un crédito de US$ 300 mil a 180 días?
“El financiamiento en dólares hoy está muy barato en la Argentina", destaca un referente con amplia trayectoria en el sector bancario
¿Conviene vender granos o tomar un crédito para financiar la compra de insumos de la próxima campaña 2024/25? Un arttículo de CREA destaca que no existe –en la actual coyuntura argentina– una respuesta cierta a esa pregunta, pero sí es factible estructurar un análisis para poder definir la toma de decisión.
¿Vender soja o tomar crédito?
Hernán Satorre, asesor del CREA Herrera Vega-Pehuajó y responsable de la Mesa Empresaria de las regiones CREA Oeste y Sudeste, planteó un ejemplo práctico para explicar la metodología de análisis.
El mismo contempla la venta de 1000 toneladas de soja versus la toma de créditos en dólares a una tasa nominal anual del 2,0% y con un costo financiero del 4,2%, uno de los cuales es con un plazo de 180 días, mientras que el otro es de 270 días.
Para poder realizar el análisis de vender soja vs. tomar un crédito, se considera la proyección de inflación promedio informada por el último documento del Relevamiento de Expectativitas de Mercado del Banco Central (REM-BCRA), así como los precios futuros del contrato Soja Rosario y del dólar del Matba Rofex.
Venta de soja por $240 millones
El escenario base consiste en calcular lo que se obtendría con la venta de soja, en este caso una suma de 240 millones de pesos, la cual debería destinarse a la compra de agroinsumos. Para equiparar tal cifra sería necesario tomar una crédito de 287.116 dólares.
Ahora bien, con el crédito a 270 días el valor total en dólares por abonar al momento de vencer el préstamo es de 296.036 dólares, el cual, con el tipo de cambio esperado actualmente para esa fecha, equivaldría a 455 millones de pesos.
La cifra de 455 millones de pesos a noviembre de 2024, al ser deflactada por la inflación esperada en ese horizonte temporal, equivale actualmente a 187 millones de pesos, lo que implica que, con los supuestos considerados, resultaría más conveniente tomar el préstamo que vender grano para financiar la compra de insumos. La misma lógica se aplica con el ejemplo del crédito a 180 días.