Cambiaron la forma de producir y aseguran que hasta los terneros tienen cara de felicidad

Viraron a un sistema de crianza en donde el ternero se cría junto a la madre; los resultados que destacan

Cambiaron la forma de producir y aseguran que hasta los terneros tienen cara de felicidad
30deEnerode2025a las11:26

Carlos Vaudagna (62), Paula Zjaria (54) y su hija Julieta (24) viven y producen en un campo cercano a La Tordilla, en Córdoba. Desde el año 2019 viraron su actividad tambera y ganadera de una producción intensiva, a una con bases en la regeneración y el holismo, que se enmarca en su fundación Territorio Tero.

En una extensa charla, nos cuenta la historia detrás de este método de producción que adoptaron, con desafíos y resultados.

Virar la crianza de terneros a un "método natural"

¿Cómo empezó el cambio de sistema de producción?

Carlos: "¿Por qué decidimos hacer un cambio en el sistema de crianza…? Siempre tenemos que preguntarnos los por qué, ¿por qué seguíamos haciendo el otro sistema que era 'antinatural, artificial'?... Porque tenemos reglas de bienestar animal y queremos que sea todo lo más parecido a lo natural, pero no le encontrábamos la vuelta a la crianza artificial. Cuando vos crias un ternero fuera de las reglas naturales se transforma en algo artificial, y la realidad es que no nos iba bien con ese sistema, teníamos muchos problemas de enfermedad, de mortandad, relacionados en general con la mano de obra. Sé que en otros lugares ese sistema funciona, pero a mí no me funcionó… Lo vengo haciendo hace 30 años y jamás lo pude lograr, y, sobre todo, tenía mucha frustración, tenía un trauma con eso. A mí la crianza siempre fue algo que me generó dolor.

Hasta que en una pequeña charla que le estábamos dando a un productor, le preguntamos cómo él criaba a sus terneros, ese productor es Claudio Miretti, y él me dijo que los tenía 15 días más o menos con la madre hasta que el ternero adquiría un tamaño que él consideraba que estaba muy fuerte, y después los apartaba y hacía la crianza artificial. Y ahí se me iluminó una idea y pensé: ‘Che, mirá que interesante esto. Podríamos hacer lo mismo’.  

Entonces le empecé a preguntar a Claudio: “¿Eso no te perjudica la vaca, cuando la vaca se va al tambo cómo hace el ternero?” Y me dijo que los terneros se quedaban afuera, en los lotes, en los piquetes, que después la vaca lo buscaba, que no le generaba un problema que estuviera esos 15 días el ternero con la madre. Me dijo algunas cosas del comportamiento del ternero que creí que me iban a hacer ruido, pero no. Entonces dijimos, lo arranquemos"

carlos de territorio tero

¿Cómo era el sistema antes y cómo es ahora?

Carlos: El pre-parto es la parte del proceso que sigue exactamente igual: se aparta la vaca en una parcela con pasto, se les da una suplementación de maíz y soja, la vaca da a cría ahí, se queda 24 o 48 horas el ternero con la madre, ahí se hace la parte sanitaria del ternero y de la madre, se revisa que no tenga restos de placenta, al ternero se le desinfecta el pupo… se los revisa a ambos.

Hasta mayo del año pasado, una vez que la vaca paría, la vaca se separaba y se introducía al rodeo general, y el ternero ya entraba en un proceso de crianza 'artificial'. Ahí ya tenías la primera disrupción, porque el ternero es separado de la madre: la madre sufre, el ternero sufre.

Nosotros usábamos un sistema con tetinas, teníamos 15 terneros por piquete, se trataba de que fueran contemporáneos, de más o menos la misma edad, y se criaban con leche materna, leche del tambo, calentada a 37°. Dos veces por día se les daban dos litros por toma aproximadamente, eran 4 litros totales. En el piquete se les daba un balanceado y tenían acceso a rollos y agua. Estaban sueltos, tenían sombra, y una protección para las tormentas. A grandes rasgos, era bastante parecido, lo único que faltaba la madre, y dependía del cuidado de una persona.

Entonces empezamos con esta historia y dejamos de separar al ternero de la madre y de encerrarlo, y vimos que el ternero se adaptaba perfectamente al movimiento del rodeo, o sea, seguía a la madre. Cuando la madre iba a comer la comida a los comederos, el ternero se quedaba por ahí o estaba con la mamá, tomaba la leche cuando quería, cuántas veces quería. Después empezamos a ver que compartían madres, o sea, había una que les daba leche a dos o a tres, había vacas con poco instinto materno y no le daban la leche, entonces otras con más instinto se las compartía… Empezamos a ver que empezó a haber una parte de comportamiento de rodeo, de manada.

terneros y vacas