OMC: ¿qué sigue al fracaso de la Ronda del Milenio?
El fracaso de la ronda de negociaciones cuyo intento de inicio se viomalogrado en Seattle ha creado un desánimo generalizado inclusive en aquellosque ya eran pesimistas. En virtud de los acontecimientos queda conocer qué pasórealmente en Seattle y luego qué se puede esperar para el futuro.
En primer lugar, al observar los acontecimientos se puede concluir que elfracaso en las negociaciones no se debió a la falta de acuerdo en el tema agrícola,sino en otros ítem como los bienes industriales (principalmente textiles) y ala postura de los EE.UU. de querer incorporar a la discusión la legislaciónlaboral.
La UE-15 planteó la discusión de una agenda global, bien amplia, y los EE.UU.en víspera de elecciones deseaban discutir una agenda más acotada. Lapresencia de agitadores pertenecientes a Organizaciones no Gubernamentales(inclusive el sindicato portuario de Seattle) y el discurso del presidenteClinton podrían hacer concluir que en este momento los EE.UU. no estabaninteresados en avanzar en un ronda global. Inmediatamente, se presenta alCongreso de los EE.UU. para su aprobación el acuerdo comercial con China y elrequerimiento de que se otorgue a este país la condición permanente de NaciónMás Favorecida, cuando se estimaba que recién se discutiría en el año 2000.Las graves ineficiencias de organización del inicio de la ronda y la escasa y/onula participación que se permitió a la gran mayoría de los 135 países queintegran la OMC, también hacen pensar que no se facilitó el desarrollo de lasnegociaciones.
En el tema agrícola había un documento preacordado que se elaboró con eltrabajo previo a Seattle, y al inicio de las deliberaciones éste había sidocambiado por otro documento acordado entre los EE.UU. y la UE-15. Finalmente, sealcanzó un documento que, sin mostrar importantes avances, era un principio denegociación; la ronda se iniciaba, pero que no iba mucho más allá del mandatoestablecido por el artículo 20 de la Ronda Uruguay del GATT.
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