Paraguay admitió la sospecha de aftosa

11deOctubrede2002a las08:25

Una misión sanitaria argentina efectuará la semana próxima inspecciones en campos de Paraguay, luego de que los primeros análisis epidemiológicos sobre un presunto caso de fiebre aftosa en ese país dieron un resultado positivo, informó ayer el titular del Servicio de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), Bernardo Cané.

El propósito del equipo de veterinarios es "confirmar o no" la existencia de esta enfermedad animal, que no afecta al ser humano pero que provoca serios perjuicios económicos. Hace 8 meses que la Argentina se mantiene libre de brotes, y de ello depende la reapertura de otros mercados a las exportaciones de carnes.

El Comité Ejecutivo del Convenio Cuenca del Plata, coordinado por el Centro Panamericano de Fiebre Aftosa (Panaftosa), confirmó "la existencia de una sospecha" de la enfermedad en el departamento paraguayo de Canindeyú, distrito de Corpus Cristi, en la frontera con Brasil.

Aunque aún se trata de una presunción, el titular del Senasa expresó que "se tomaron pruebas en los animales e inicialmente hubo resultados positivos". Para alcanzar certezas sobre el asunto, explicó Cané, todavía resta conocer los datos que aportará una contraprueba, disponible en una semana.

Sin embargo, el funcionario indicó que a partir de hoy comenzaría a destrabarse el tránsito de algunos productos entre la Argentina y Paraguay, tras el mutuo y súbito cierre de fronteras dispuesto a principios de esta semana.

"Con un mayor conocimiento de la situación sanitaria de Paraguay se podrían limitar las restricciones a los productos provenientes del departamento de Canindeyú, donde se detectó la sospecha de foco", dijo Cané, a su regreso de la reunión de la Comisión de Emergencia realizada en Río de Janeiro, Brasil, con la participación de los responsables sanitarios de la Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Uruguay y Paraguay. En el cónclave sanitario se declaró, con la rúbrica de todos los integrantes -incluso Paraguay-, la "sospecha de foco" y se tomó la decisión de enviar misiones técnicas a la zona, ubicada a unos 250 kilómetros de la frontera con la Argentina.

La determinación de clausurar la fronteras y de prohibir el paso de camiones paraguayos por suelo argentino surgió por "la falta de información confiable sobre la situación sanitaria desde Paraguay", afirmó el titular del Senasa.

De la delegación argentina en Brasil participó también el productor agropecuario y ex presidente de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap), Dardo Chiesa. "Paraguay es un interrogante; aunque no sabemos si hace dos años el virus entró en la Argentina desde ese país, tenemos desconfianza; se debe llegar hasta las últimas consecuencias antes de reabrir la frontera", dijo Chiesa, designado por Panaftosa como el interlocutor de los productores locales en ese organismo.

En cuanto a los controles dentro del país, el titular del Senasa indicó que comenzará a vacunarse el rodeo e inspeccionarse los mataderos y los frigoríficos en las provincias limítrofes en el norte del país. Uno de los factores que juegan en favor del control del tránsito animal es que la paridad cambiaria no favorece el comercio de ganado vacuno de Paraguay a la Argentina.

Por la autarquía

En otro orden, el presidente del Senasa cuestionó el rechazo manifestado por nueve entidades del sector agropecuario y de la alimentación al proyecto de ley de autarquía del Senasa, impulsado por el diputado Adrián Menem (PJ-La Rioja). "La discusión es que quieren cogestionar en los aspectos técnicos, y eso no sería aceptable en ningún organismo sanitario, porque los administrados no pueden formar parte de los aspectos técnicos", dijo Cané, y disparó al concluir: "Además, son los que firmaron el acta de ocultamiento cuando reapareció la fiebre aftosa en el país".

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