Soluciones informáticas para impulsar los negocios del campo
Juan Rebolini y Blas Briseño asesoran en el desarrollo de proyectos de inversión
"Comenzamos a desarrollar un proyecto juntos porque vimos que la fusión iba a ser explosiva, que la sinergia iba a aportar un valor agregado a la suma de las partes", comentó Blas Briseño, director comercial de Agropuerto, una firma consultora en agronegocios y proveedora de soluciones informáticas para la cadena agroindustrial.
El emprendedor, ingeniero en sistemas, de 37 años, se refirió así a cuando, en marzo de 2001, se juntó con Juan Martín Rebolini, economista, de 38 años, para emprender un proyecto que combinara las actividades que hasta entonces los dos socios desarrollaban por separado. La inversión inicial fue de US$ 100.000.
Para Rebolini, la compañía ingresó en el mercado para cubrir un vacío. "Veíamos que la cadena de alimentos necesitaba vasos vinculantes entre lo que es un diagnóstico y las herramientas tecnológicas para llevar adelante lo que uno estaba planificando", relató. De esta manera, el negocio de Agropuerto se divide en dos áreas: la consultoría en agronegocios y la búsqueda de soluciones tecnológicas para empresas agropecuarias.
Dentro del área de consultoría, a su vez, conviven dos áreas estratégicas de negocios: el asesoramiento de estrategias comerciales de granos y carnes y el desarrollo y gerenciamiento de proyectos de inversión.
Por su parte, la otra pata sobre la cual se sostiene Agropuerto es el área tecnológica. Allí, los emprendedores prevén acercar a los miembros de la cadena de agronegocios soluciones para el seguimiento operativo de las empresas y de gestión, administración, procesos comerciales y contabilidad. "El propósito de los servicios de consultoría y del software es vincular los procesos administrativos de unos y de otros y simplificar el contacto y la registración de operaciones para que sea más dinámica, más segura y más simple", sostuvo Briseño. Las aplicaciones de los productos que ofrecían en la compañía se fueron adaptando de acuerdo con la coyuntura.
"En 2002 el medio más habitual de pago fueron los granos. Un proveedor que pagaba en camiones que tenían todo un recorrido que no estaba en los procedimientos de la empresa y obligaba resolverlo administrativamente; nosotros vimos la oportunidad y la resolvimos como servicios más sistema", apuntó Rebolini, presidente de la compañía.
Según afirmaron los emprendedores, el software es algo complementario de su servicio. En este sentido, el negocio de Agropuerto se centra en ofrecer una consultoría a una empresa para el desarrollo de sus negocios, la organización administrativa y su gestión, y, además, brindarle la herramienta técnica.
Perspectivas
Desde que ingresaron en el mercado los emprendedores consiguieron hacer crecer la compañía sostenidamente. El año pasado lo cerraron con una facturación de $ 800.000 y este año esperan generar negocios por $ 2 millones. Trabajan con agroindustrias y empresas agropecuarias. Dentro de su cartera de clientes se encuentran Pioneer, Dupont y Kraft. En sus oficinas, Briseño y Rebolini trabajan con una dotación de 25 personas. Y apuestan a llevar su negocio hacia otras latitudes: este año, planean abrir filiales de la empresa en Mendoza y en España.
