Los programas de fidelización llegaron a los frigoríficos y hacen crecer las exportaciones

Con una inversión inicial de u$s220 mil, AB&P creó una cadena de valor vinculando marca y productores con la alta calidad. La idea de implementar un club de proveedores le permitió incrementar rápidamente sus envíos al exterior

En el año 2002, el frigorífico Argentine Breeders & Packers (AB&P) notó ciertos cambios en el negocio de su industria que no dejó pasar por el aire.

Los consumidores locales y extranjeros demandaban carne de calidad, libre de aftosa o de vaca loca, al tiempo que seguía persistiendo la “cultura matarife” de la industria, los productores ganaderos no eran fieles, la toma de decisiones pasaba por el precio y las relaciones comerciales eran frágiles e inestables.

Con una industria local muy fragmentada, afectada por una gran capacidad ociosa de faena y marcada por otros factores como la evasión fiscal y previsional, el figorífico AB&P trabajó sobre el valor de su marca y la calidad de sus productos para optimizar su negocio.