El Gobierno criticó a los ruralistas por sus reclamos
Apuntan a lo político, dijo Echegaray.
Casi como en los peores momentos del conflicto por las retenciones móviles, el Gobierno y el campo volvieron a cruzar duras críticas. Con los productores realizando asambleas, tractorazos y preparando un gran encuentro para el próximo sábado en Olavarría, ayer quien abrió el fuego desde el oficialismo fue Ricardo Echegaray, jefe de la Oficina Nacional de Control Comercial Agropecuario (Oncca), que acusó al sector de realizar reclamos que están más cerca de lo político que de las cuestiones técnicas.
Echegaray se convirtió así en la voz oficial que sale a contestarle al agro mientras el secretario de Agricultura, Carlos Cheppi, intenta abrir canales de negociación. El nuevo rol de Echegaray, encargado de un organismo de segundo nivel, lo ejercía antes el jefe de Gabinete Alberto Fernández, por las radios. Precisamente, esta última costumbre del ex funcionario siguió ayer el titular de la Oncca.
"El nivel de presión y discusión que da el campo está más apuntando hacia lo político que hacia los problemas de naturaleza técnica", señaló ayer Echegaray, que, en declaraciones a Radio Continental, añadió: "La opinión de algún dirigente se puede convertir en una cabalgata deportiva por la crítica misma".
Rápidos de reflejos en un momento donde están buscando que la opinión pública apoye otra vez sus quejas por la ganadería, la lechería, las economías regionales y la segmentación de las retenciones, los ruralistas le respondieron a Echegaray. "No hay ninguna intencionalidad política en los reclamos; son reclamos sectoriales técnico-económicos que no están siendo atendidos por el Gobierno", afirmó a LA NACION Hugo Luis Biolcati, vicepresidente de la Sociedad Rural Argentina.