El maíz tiene una hinchada fiel
Productores de todo el país llegaron hasta Buenos Aires para ver las últimas novedades de un cultivo clave.
Para algunos puede parecer una idea loca, pero para sus impulsores, convencidos, no lo es. Cuando el verbo más conjugado hoy parece ser "recortar", algunos prefieren conjugar otro: "apostar". En esa línea se enmarcó el seminario de maíz que organizó esta semana la empresa Pioneer, convencida de haber trabajado ya durante un largo tiempo hacia adentro, fortaleciéndose en tecnología y servicio, y que ahora llegó el momento, más allá de la coyuntura, de salir a contarlo.
La agricultura no es un negocio de momentos, sino, por el contrario, de plazos largos. Ese concepto atravesó las palabras de Alejandro Bibiloni, presidente de Pioneer, al abrir el encuentro y presentar al staff de la compañía, una de las líderes en el negocio maicero, más allá de un perfil bajo que, con prudencia, parece comenzar a dejar atrás.
Ahora, luego de trabajar para adentro, decidieron dar públicamente la cara. Y el seminario de maíz, que abordó temas macro del negocio y otros muy específicos de tecnología, forma parte de esa estrategia.