Cepolandia, el país de los eufemismos
Una lista interminable de intervenciones, mientras que el Gobierno se lanzó en la campaña del sí
En la República de Cepolandia no hay Covid, volvió el fútbol (lo del aforo es un tema menor), crece el turismo y regalamos viajes de egresados para todos y todas. Cerramos paritarias por encima del 50%, regalamos bonos de 90 mil pesos a estatales y estamos frente a la campaña del sí. El grave problema es que para todo ese no está Mastercard, como diría la publicidad. Necesitamos plata. ¿Cómo se consigue? tomando deuda -ya nadie más nos quiere prestar- o emitiendo. Con esta segunda opción estamos. Con las consecuencias lógicas que sabemos que esto trae. Inflación. Sí, más inflación.
El principal problema que intenta contener el Gobierno es la suba de precios. Por eso vuelve a recurrir a viejas y fallidas recetas como los controles de precios o nuevos cepos.
Control, sinceramiento, reperfilamiento, nuevos requisitos, limitaciones. Decile como quieras. Son cepos.
Ya tenemos:
- Cepo al dólar minorista
- Cepo al dólar financiero