Siembra y contexto: qué se espera para la campaña de soja 2020/21

El escenario de precios cambió. El maíz ganó protagonismo pero la soja se mantiene atractiva frente a una posible restricción hídrica por La Niña.

Por Nicolás Degano

En noviembre comienza con mayor ritmo la siembra de soja, pero los planteos agrícolas en muchos casos ya están definidos.

Luis Zubizarreta, presidente de la Asociación de la Cadena de la Soja Argentina (Acsoja) adelantó que ven una "interesante" voluntad de siembra para la nueva campaña de la oleaginosa.

"El área no va a tener demasiados cambios contra los últimos años", cuenta en diálogo con Agrofy News. "Eventualmente podría haber un pequeño incremento en la cosecha", agregó.

La Bolsa de Cereales de Buenos Aires presentará el dato oficial de siembra el 23 de septiembre. Por el momento, adelantaron que de cara a la siembra los productores están pendiente del escenario climático, que estaría influenciado por La Niña.

Frente a esta situación (de potencial restricción hídrica), si bien puede generar que algunos lotes queden afuera de la rotación, se espera que la soja tienda a mantener el área. Si llueve, el cultivo podría tener un crecimiento en la intención.

También hay que tener en cuenta que su principal competidor, el maíz, presenta buenos márgenes, pero del lado negativo para la intención de impantación aparece el hecho de que necesita una mayor inversión.

La Bolsa de Comercio de Rosario comentó en la última proyección, que la estimación de maíz 2020/21 subió a 48 millones de toneladas por mayor siembra respecto a un mes atrás. En tanto, la primera estimación de área de soja muestra una leve suba de 100.000 hectáreas respecto al año pasado, este año cubriría 17,3 millones de hectáreas.

Ver sección clima del Especial Soja 2020/21.

La encuesta de la Austral (Ag Barometer) mostró cómo mejoró la confianza de los productores por primera vez desde la fuerte caída por el resultado de las elecciones primarias de 2019. El relevamiento entre productores destacó que la intención de inversión alcanzó un máximo de dos años frente a la necesidad de capitalización por el cepo al dólar y la baja de la tasa en pesos.

Como novedad, el Banco Central endureció aún más el cepo al dólar y desde el campo manifestaron su preocupación por una potencial inflación en dólareas de los insumos.

Por otro lado, la última encuesta a productores CREA mostró una retracción de la superficie bajo arrendamiento. Aunque hay que aclarar que esta encuesta se realizó en la previa a la reciente suba que tuvo el precio de la soja y el maíz.

“En la intención preliminar de siembra 2020/21 se observa un crecimiento del girasol y del maíz tardío en desmedro del maíz temprano, esto último probablemente a causa del escenario de restricción hídrica actual y el previsto hacia fines del presente año por el Servicio Meteorológico Nacional (SMN)”, apuntó Matías Campos, integrante de la Comisión de Agricultura de CREA, tras el último relevamiento, que mostraba la participación de la soja con una ligera reducción con respecto al año pasado.

Los referentes CREA consultados habían efectivizado o comprometido la compra en el pasado mes de julio del 71% del total de las adquisiciones programadas de semillas para la campaña gruesa 2020/21, mientras que en el caso de los fertilizantes y fitosanitarios esa proporción era del 48%. En las tres situaciones se trata del mayor nivel registrado en el último lustro.

Consultá el Agroweek de insumos.

El adelantamiento de las compras de agroinsumos se sustenta en oportunidades de financiamiento en pesos ofrecidas por el sector privado, fundamentalmente por entidades bancarias –con un uso preponderante de las tarjetas agropecuarias– y empresas de agroinsumos. “Además, la incertidumbre en cuanto al abastecimiento por inconvenientes derivados de la pandemia y la posible suba de precios colaboraron para que se presentara esa tendencia”, apuntó Matías.

Dante Romano, analista de mercados de fyo, adelanta que al principio de la campaña 2020/21 había un buen escenario para el trigo y la soja (en parte por la menor inversión que demanda contra su principal competidor, el maíz). Pero en las últimas semanas el escenario de precios cambió y la relación pasó a estar más favorable para el maíz.

Ver también: Se revirtió la relación de precios entre la soja y el maíz

De igual manera, "las definiciones de área estaban bastante tomadas, no esperamos un reacomodamiento fuerte", comenta Romano. También coincidió en que la compra de insumos para la campaña 2020/21 se adelantó por la oportunidad que vieron los productores para cubrir una liquidez momentánea.

En área, el principal cultivo de la Argentina

Pese al estancamiento de área de las últimas campañas, la soja sigue siendo por lejos el principal cultivo de la Argentina en cuanto a superficie. Representó un 67 % de la superficie gruesa 2019/20, contra un 24 % del maíz, 6 % de girasol y 3 % de sorgo.

"Va de la mano de la demanda", destaca el presidente de Acsoja, haciendo referencia a el creciente consumo de proteína vegetal a nivel global, traccionado principalmente por Asia, y sobre todo China. Allí se observa desde hace un tiempo un cambio en la dieta y una creciente importación de alimentos: "El mundo es el que ha traccionado el crecimiento de la soja".

Lo que sucede, bajo la visión de Acsoja, es que otros países supieron aprovechar mejor que la Argentina esta mayor demanda. Como Brasil, que este año aprovechó la guerra comercial del gigante asiático con Estados Unidos y rompió récords de exportación. También hubo un crecimiento en Bolivia y Paraguay.

"Brasil tiene costos de producción y logísticos mayores a los nuestros. Sin embargo en los últimos 10 años vemos que Argentina quedo muy rezagada en su crecimiento agroindustrial. En ese lapso Brasil creó más de una cosecha Argentina de soja y multiplico varias veces su producción de todo tipo de carnes", destaca el presidente de Acsoja.

Ver últimas noticias sobre soja en Brasil.

Rodolfo Rossi, ex presidente y fundador de Acsoja, destacó que hace unos 15 años en Argentina hay buenos rindes, comparables al resto del mundo. Pero que se estabilizaron a nivel productor por una "muy entendible" falta de inversión en tecnología por el fuerte nivel de retenciones.

Este manejo "defensivo", según Rossi, tiene que ver con un menor foco en fertilización, inversión en semillas y recambio varietal.

"El tren todavía está en la estación", grafica Zubizarreta. "Estamos convencidos de que estamos a tiempo de tomar políticas que permitan incentivar aún más la producción".

Bajo este marco, desde la cadena de la soja realizaron una propuesta de eliminación gradual de retenciones que permitiría incrementar la producción y aumentar así la recaudación y el aporte de divisas y empleo del cultivo en la Argentina. Esta propuesta se realizó en conjunto con la Fundación FADA, que estuvo a cargo del informe.

En la cadena citan la Curva de Laffer, que muestra la relación entre la presión impositiva y la recaudación: "Si tenés una alícuota que sube se recaudas más, pero llega un momento que es tan alta que la recaudación baja. La recomendación nuestra es bajar los impuestos para recaudar más", cuenta Zubizarreta y agrega que se tienen en cuenta las necesidades del contexto, por lo que entienden que el ajuste en retenciones debería ser gradual.

La ampliación del área de soja sería mayormente en el norte, generando "desarrollo en las zonas que más lo necesitan". "La demanda está y es creciente. Soy optimista de que vamos a tener el incentivo de precios para mejorar la producción", concluyó Zubizarreta.

El rol de la soja en el actual contexto

Las retenciones a la soja y los subproductos están en 33 % tras la suba de marzo. Por entonces, se anunció que habría una compensación para productores de hasta 1.000 toneladas producidas durante el ciclo 2018/19. Esta segmentación está todavía pendiente de cobro (se pagaría a partir de este mes) y aún no se sabe si continuará durante el ciclo 2020/21.

Además, el gobierno nacional evalúa volver a implementar un cambio en el esquema de retenciones, bajando la alícuota para el aceite de soja y la harina. Este tema genera voces a favor y en contra, ya que los productores apuntan contra este "diferencial", que se eliminó en 2018, como un subsidio a la industria. Del otro lado, los procesadores aseguran que se desincentiva el agregado de valor.

Ver también: Basterra confirmó que estudian cambios en retenciones

Cadena de soja: definiciones con impacto

Uno de los temas en el que se aguardan definiciones es en el tema logístico: "Argentina tiene el desafío de definir uno de los más importantes proyectos de inversión", comentó Zubizarreta haciendo referencia a la hidrovía, cuya concesión vence en 2021 y en donde el gobierno nacional junto a las provincias tendría la intención de formar una empresa estatal para la administración.

Otro punto en la logística son los ferrocarriles, que tienen un gran impacto sobre la producción del norte, en donde el rubro fletes complica la ecuación. En 2014 se transportaron por ferrocarril 6,49 millones de toneladas de granos, contra 10,46 millones de 2019. El rubro granos fue el que mayor participación ganó en la carga total transportada.

En cuanto a la tecnología y la productividad, desde la cadena destacan la posibilidad de avanzar en una Ley de Semillas y en otra de fertilización.

También hay expectativa por la Ley de Biocombustibles, que está próxima a vencer y en el sector buscan avanzar en una propuesta superadora, que impactaría sobre la producción de biodiésel: "Argentina tiene la posibilidad de transformar energía solar en energía verde".

"Es muy amplia la agenda", destacan desde Acsoja y remarcan el trabajo que se viene realizando junto al Consejo Agroindustrial Argentino, que busca ingresar al Congreso un proyecto de Ley que potencie las exportaciones agroindustriales y otorgue un marco previsible a las políticas que se aplican al sector.

La visión a nivel productor

El consultor y productor, Nestor Roulet, comentó en diálogo con Agrofy News que no solo juega el factor económico en la decisión de siembra de los productores, sino que también inciden otros aspectos como el historial del campo y la perspectiva climática en meses claves para la definición de rendimiento.

En este sentido, destacó que el escenario cambió durante el último mes por la suba de precios del mercado internacional que tuvo su correlato local. Sobre todo en maíz, lo que generó que haya una leve caída de área con el cereal contra la campaña pasada y que le haya ganado hectáreas a la soja en el planteo para el ciclo 2020/21.

En los márgenes, se estima que con el nuevo escenario de precios la opción de incorporar maíz deja una rentabilidad mayor por hectárea que la soja. Pero a su vez requiere una mayor inversión. Aproximadamente se invierten US$ 500 por hectárea para el maíz, contra US$ 380 de la soja. Esto hace que, ante un escenario de potencial restricción hídrica, el riesgo sea menor en la oleaginosa.

Lo que destaca Roulet es que, cuando fue cerrando la campaña gruesa 2019/20 en mayo, el escenario era muy desfavorable para el maíz, ya que se presentaba como el cultivo más afectado por la pandemia de Covid-19 (por el impacto sobre los mercados energéticos).

Luego apareció China y se comenzó a recuperar el precio internacional, lo que cambió el panorama. "En mayo decía voy a hacer menos maíz, pero esa expectativa ahora cambió".

Repasando pros y contras aparece:

 - Mejor margen para el maíz (con menor presión impositiva)

 - Menor inversión para la soja (favorable en escenario Niña)

"La pregunta es, ¿vamos a tener los rindes promedio? Hay zonas en donde los perfiles de humedad están buenos para sembrar maíz ahora, pero en otras regiones no. En el norte por ejemplo no se llegó a hacer el girasol que se esperaba", comenta Roulet.

Además, concluye: "Hay que apuntar a los mayores rindes, lo que pasa es que muchas veces toda esta expectativa de mercado y climática te hace dudar. Pero tanto en soja como en maíz se debe apuntar a mayores rindes". Al mismo tiempo, destaca el rol de la tecnología, como la agricultura de precisión: "Bajó los costos y hasta aumentó la producción".

Soja: márgenes agropecuarios

Desde Márgenes Agropecuarios destacan que los costos totales en US$/ha han aumentado ligeramente respecto a agosto/20 y también respecto a septiembre/19.

Los costos expresados en quintales de soja han bajado en el último mes, ante el aumento en los precios de la soja.

La foto del día es incompleta si no se pondera el riesgo de que la producción 2020/21 sea menor a la proyectada por el impacto de La Niña, que va asociado a lluvias por debajo de las normales.

Los costos en quintales resumen la evolución de los precios y de los costos en una sola cifra. En la evaluación de los costos en quintales, lo que cuenta es el rinde que debe lograrse para cubrir los costos, tanto directos como indirectos. La unidad de cuenta no es el dólar, menos el peso, sino la soja, el maíz y el trigo.

La serie completa de costos agrícolas, desagregado en sus principales rubros, en US$/ha y en qq/ha está disponible en Márgenes Agro Online