Bayer adquiere Biagro
Con el fin de brindar al productor agropecuario, las mejores soluciones para incrementar el rinde de sus cultivos, Bayer adquirió en Argentina, la compañía local Biagro. Asimismo Bayer CropScience, potenciará los desarrollos de Biagro para convertirse en un líder en tratamiento biológico de semillas.
Hernán Bagliero, Director de Bayer CropScience para el Cono Sur.
Bayer CropScience ha firmado un acuerdo para adquirir Laboratorios Biagro, con sede en General Las Heras, Provincia de Buenos Aires. La oferta integrada incluye inoculantes promotores de crecimiento y productos biológicos para salud vegetal y control de plagas.
“La integración con Biagro, le permitirá a Bayer CropScience aumentar su exitoso negocio de semillas de soja en América Latina. Uno de nuestros objetivos es convertirnos en referentes en todo lo que al cultivo de soja se refiera y así poder brindar al productor las mejores herramientas”, remarcó Eduardo Estrada, Presidente para Bayer CropScience Latam.
Biagro es productor y distribuidor de soluciones para el tratamiento biológico de semillas. Fundada en 1984, Biagro tiene aproximadamente 140 empleados y plantas de producción en Argentina y Brasil. Su cartera de productos está compuesta por insumos microbiológicos para el sector agrícola: inoculantes, protectores y mejoradores de semillas así como microorganismos promotores del crecimiento de las plantas y otros productos para el manejo integrado de plagas basadas en cepas bacterianas.
Los principales productos Biagro son los inoculantes para leguminosas siendo el producto más importante el inoculante para SOJA basado en la multiplicación para la aplicación de bacterias de género BradyrhizobiumJapónicum en semillas de soja. Este inoculante se aplica en la semilla antes de la siembra para asegurar la existencia en cantidad y calidad adecuadas de esta bacteria en el suelo y próximo a la raíz de la soja para permitir la infección y formación de nódulos en la misma. Los nódulos formados en las raíces de la soja permitirán al cultivo transformar el nitrógeno del aire en una forma asimilable para la planta, por medio de lo que denominamos Fijación Simbiótica de Nitrógeno. Gracias a este insustituible mecanismo biológico, el cultivo consumirá nitrógeno del aire en lugar de extraerlo del suelo.