Alimentar al mundo, gracias a los avances tecnológicos
La biotecnología, el mejoramiento genético y la microbiología siguen ofreciendo la posibilidad de aumentar la producción.
|La Argentina tiene un importante papel como país exportador de agroalimentos. Sabemos que un 55 por ciento de nuestras exportaciones son de origen agropecuario y que nos enfrentamos a un mercado globalizado, cuya demanda en alimentos cada vez es mayor y más exigente no sólo en cantidad, sino también en calidad. Se estima que para las próximas décadas la demanda aumentaría entre 70 y 100 por ciento, por lo que deberíamos preguntarnos si podremos atender dicha demanda en el tiempo, con sostenibilidad de los recursos naturales.
Además de la tendencia del crecimiento poblacional para los próximos años, los cambios en los hábitos de consumo y los nuevos usos de los productos de origen agropecuario también fundamentan el crecimiento en la demanda.
Según el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura, los agronegocios o negocios agrícolas “son un sistema integral que responde a las demandas de los mercados y a los requerimientos de los consumidores, con una visión y estrategias de cadenas agroalimentarias”.
En este sentido, Manuel Alvarado Ledesma, en su libro Agronegocios: empresa y emprendimientos, plantea que en algunos trabajos de investigación más recientes, como el realizado por el Programa de Estudios dos Negocios do Sistema Agroindustrial (Pensa) de la Universidad de San Pablo, se amplía el análisis de perspectivas de sistemas agroalimentarios. Y concluye que en éstos, “las formas de coordinación son el resultado de las diferentes características de las transacciones y de las distintas condiciones institucionales para el incremento de la productividad” de los mismos.
Podemos decir entonces, que cuando queremos definir el concepto de agronegocios, no podemos ignorar que se han producidos algunos cambios, entre ellos: