¿Cómo evitar pérdidas por enfermedades en la producción sojera?

Por las enfermedades de fin de ciclo en soja se han registrado pérdidas entre un 8% y un 10% de la producción, aunque a veces puede ser más aún. Por eso desde INTA Balcarce recomiendan algunas medidas de manejo para tratar de lograr un control más eficaz en los cultivos y mejorar así los rindes.

Con respecto al manejo para el control de las EFC, se recomienda  utilizar cultivares de buen comportamiento y tratar de sembrar siempre semillas sanas.

Con respecto al manejo para el control de las EFC, se recomienda utilizar cultivares de buen comportamiento y tratar de sembrar siempre semillas sanas.

20deFebrerode2015a las12:14

El monocultivo de soja, su producción en siembra directa y las condiciones ambientales favorables contribuyen a la manifestación de enfermedades. Estas pueden llegar a imponer limitaciones a la producción, por lo cual es importante conocer y monitorear las enfermedades que afectan al cultivo desde la implantación hasta la cosecha.

Según la Lic. Marina Montoya, técnica de INTA-Unidad Integrada Balcarce, el complejo de las enfermedades de fin de ciclo (EFC) en soja  son llamadas así porque los síntomas y signos se manifiestan en los períodos reproductivos intermedios y avanzados.  Aclaró que esto no quiere decir que empiecen en ese momento, sino que pueden comenzar antes y que son varias las EFC citadas para nuestro país.

Respecto del  sudeste de Buenos Aires las más prevalentes son el tizón foliar y mancha púrpura de la semilla (Cercospora kikuchii), la mancha marrón (Septoria glycines) y el tizón del tallo y vaina y podredumbre de semilla (Diaporthe phaseolorum var sojae y Phomopsis longicolla). Además pueden aparecer la mancha por Alternaria, las bacteriosis, el mildiu, el oídio, la mancha anillada y la mancha ojo de rana, que es más importante entre las EFC de la región núcleo sojera.

La especialista subrayó que este conjunto de patógenos tienen varias características en común, como el hecho de ser, en su mayoría, necrotróficos, es decir, que se nutren de tejido vegetal muerto. Además se caracterizan por sobrevivir en el rastrojo del cultivo y también pueden pasar a la semilla.