Escrutinio incierto en Santa Fe: ningún partido asume la derrota
El escrutinio definitivo empieza mañana y demoraría una semana; hay unos 100.000 votos sin computar, que serán determinantes. El triunfo en la puja por la gobernación sigue estando al alcance de cualquiera.
Lifschitz, ayer, en Rosario; se mostró confiado en ampliar la diferencia.
La tensión y la incertidumbre que desde anteayer surcan esta provincia no ceden. Y no lo harán por varios días más. El triunfo en la puja por la gobernación sigue estando al alcance de cualquiera. El recuento definitivo de los votos comenzará mañana y podría estar terminado una semana después.
El cierre del escrutinio provisorio ratificó que la diferencia entre el socialista Miguel Lifschitz; el candidato de Pro, Miguel Del Sel, y el kirchnerista Omar Perotti es ínfima. Según ese registro, Lifschitz consiguió el 30,69% de los votos y Del Sel, el 30,58%. Los separan apenas 2128 sufragios. Perotti, por su parte, alcanzó 29,25 puntos y quedó a 26.196 votos del primero. El escrutinio definitivo empezará mañana y estará a cargo del Tribunal Electoral de la provincia, que preside el titular de la Corte Suprema local, Roberto Falistocco.
El recuento provisorio terminó ayer poco después de las 5, con el 95,45% de las mesas escrutadas. El 4,55% restante, 347 mesas, representa casi 100.000 votos, por lo que el resultado podría revertirse.
Los votos de esas 347 mesas no se contaron porque, en el transcurso del recuento de la noche del domingo, la justicia electoral detectó alguna falla o irregularidad en los telegramas enviados por los presidentes de mesa y decidió apartarlos. Esos telegramas se revisarán junto con los del resto de las mesas a partir de las 8 de mañana.