Son microscópicos, pero impactan a gran escala

Los microorganismos del suelo perdieron diversidad y funciones en el NOA, debido al desmonte y la siembra de cultivos. Productores e investigadores advierten que disminuyó la fertilidad.

Estudios recientes avanzan sobre el conocimiento de los microorganismos del suelo en el NOA.

Estudios recientes avanzan sobre el conocimiento de los microorganismos del suelo en el NOA.

16deJuliode2015a las08:18

Durante muchos años la comunidad científica se refirió al suelo como "la caja negra", debido a que se sabía muy poco sobre la estructura y la función de los microorganismos que lo habitan. Aún hoy se logró aislar y caracterizar menos del 10% de estas poblaciones microscópicas, pese a su relevancia ambiental y a los servicios ecológicos que brindan, pero afortunadamente existen distintas investigaciones que apuntan a revelar sus secretos.

Desde la cátedra de Microbiología Agrícola de la Facultad de Agronomía de la UBA (FAUBA), dos estudios recientes avanzan sobre el conocimiento de los microorganismos del suelo en el NOA, donde encontraron grandes modificaciones debido al desmonte y a la incorporación de nuevas tierras a la agricultura, y en la Región Pampeana, donde el uso de tecnologías orientadas a aumentar el rendimiento de los cultivos también genera un impacto sobre el ambiente.

"Los microorganismos cumplen un rol muy importante en todos los ecosistemas", advirtió Luciana Di Salvo, docente de Microbiología de la FAUBA. "Las nuevas tecnologías moleculares, en especial la metagenómica, permitieron hacer grandes avances. Sin embargo aún queda mucho por conocer, especialmente la relación que tienen estas poblaciones con el funcionamiento del suelo", agregó Micaela Tosi, ayudante de la misma cátedra.

Las Yungas, muy comprometidas

"En el NOA, donde en las últimas décadas se introdujeron grandes disturbios en las tierras prístinas de las Yungas por la incorporación de cultivos, encontramos alteraciones muy grandes en las comunidades microbianas de suelos que fueron desmontados y sembrados, principalmente durante los primeros años de agricultura. Hallamos una reducción drástica en la cantidad de microorganismos respecto de los suelos vírgenes, que no se restableció con los años que llevan bajo el manejo agrícola en la zona", explicó Tosi, quién estudió la problemática en el norte del país para su tesis de doctorado.

Además, en su investigación encontró una menor actividad de los microorganismos del suelo y una posible pérdida de eficiencia que, a su vez, podría relacionarse con una caída de la materia orgánica observada en lotes con muchos años de agricultura. "Estos cambios afectan el ciclado de la materia orgánica y la disponibilidad de nutrientes para los cultivos, influyendo directamente en la fertilidad de los suelos", afirmó.