Fungicidas: cinco claves para aplicarlos en soja

El experto en pulverizaciones Daniel Leiva, de INTA Pergamino, se refiere al caudal, la presión y el tipo de pastilla.

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También habla sobre el agregado de un tensoactivo y un antievaporante al caldo de aplicación.

También habla sobre el agregado de un tensoactivo y un antievaporante al caldo de aplicación.

03deFebrerode2016a las08:48

La soja de primera avanza en su ciclo en la zona central del país y se acerca al período crítico para determinar su rendimiento. Asimismo, también crece la presión de enfermedades fúngicas y plagas, sobre todo, chinche, según datos que viene reportando el INTA Pergamino en las últimas semanas.

Considerando que el potencial de rendimiento del cultivo en esta región es alto, exceptuando ciertos sitios que están sufriendo severos déficit hídricos en estos últimos días, la respuesta al control de enfermedades y plagas debe ser contundente, dice Daniel Leiva, especialista en aplicaciones agrícolas del INTA Pergamino, en diálogo con Clarín Rural.

Consejos clave a tener en cuenta 

Por eso, Leiva brinda consejos clave a tener en cuenta para hacer aplicaciones terrestres o aéreas de fungicidas, luego de hacer los monitoreos ajustados que así lo determinen.

En el caso de equipos terrestres, las recomendaciones se basan en tres cuestiones centrales.

“Nuestros trabajos de campo para el tratamiento de enfermedades de fin de ciclo en esta época del año muestran que la mayor eficacia de control la logramos aplicando un alto volumen de agua y fungicida por hectárea (entre 120 a 150 litros), alta presión (5 kilos por centímetro cuadrado) y el uso de una pastilla de cono hueco.