Una bacteria se convierte en fertilizante natural
Con la participación del INTA, un equipo de investigadores modificó el genoma de una bacteria para que capte nitrógeno del aire y lo transforme en amonio.
Este desarrollo permitirá reducir los costos de producción y mitigar el impacto ambiental.
La aplicación eficiente de fertilizantes en la agricultura es fundamental debido a que tiene un efecto significativo en los rindes de cultivos como trigo, maíz y arroz. Por esto, un equipo de investigadores de la Argentina, España y el Reino Unido lograron modificar el genoma de la bacteria Pseudomona protegens para que capte nitrógeno del aire y lo transforme en amonio. De esta forma, se obtiene un fertilizante natural que reduce los costos de producción.
Nicolás Ayub, investigador del Conicet que trabaja en el Instituto de Genética del INTA, se refirió a la importancia de la obtención debido a que “este desarrollo es una excelente alternativa a la fertilización nitrogenada de los cultivos y puede tener un impacto muy grande en la producción de alimentos del planeta”.
En general, las pérdidas de nitrógeno aplicado con los fertilizantes son elevadas, lo que disminuye sensiblemente su uso por la planta y, en consecuencia, los rendimientos del cultivo.
Así, en la búsqueda de una alternativa a la fertilización nitrogenada, el equipo liderado por Ayub se orientó a la modificación genética de Pseudomona protegens, bacteria que protege a las plantas de la acción de patógenos. “Pudimos introducir cerca de 50 genes que codifican para proteínas lo que le permite a la bacteria captar nitrógeno del aire y transformarlo en amonio para que la planta pueda usarlo”, explicó.
“Pseudomona protegens no fija nitrógeno”, señaló Ayub. “Fue necesario introducir esa cantidad porque la nitrogenasa no es una enzima sino que es un complejo enorme que necesita como mínimo entre 20 y 25 proteínas para poder funcionar”, expresó.