¿Qué hacemos con las Semillas?
FADA presentó una alternativa novedosa para la regulación. Los puntos más innovadores y “Las Dolly-Semillas”, una historia visual para entender de dónde viene la discusión.
Propuesta de FADA que plantea "cambiar el eje de discusión".
FADA (Fundación Agropecuaria para el Desarrollo de Argentina), da a conocer una alternativa novedosa en relación a las discusiones de propiedad intelectual y marco regulatorio de semillas. “Esta propuesta intenta ir por fuera de la caja” afirman los directivos de FADA, “cambiar el eje de discusión, salir de la dualidad en contra – a favor con un fin netamente propositivo”
Para ello la institución comienza apuntando los cuatro puntos innovadores de este planteo.
El primer ítem, que es una fórmula “simple” y eso deriva en que sea de bajo costo. El productor hace un pago único, anual y por bolsa. Como un Netflix de semillas: “se paga un valor único por bolsa sin importar qué semilla se utilice, al igual que la plataforma de películas y series en la que podés ver cualquiera con el pago de una misma tarifa”. Además se establece que paga por toda la mejora genética completa.
Ese pago va a un fondo y los semilleros cobran de acuerdo a su participación en el mercado a cuán nueva sea la semilla (por las semillas más nuevas se cobra más que por las más viejas).
De esto último deriva el segundo punto destacable, el “valor decreciente” que se le otorga a las tecnologías, se premia a las más nuevas, lo que también promueve la innovación.