En búsqueda de mayores rindes y más productividad
La realidad del cultivo de soja en el país lleva a la necesidad de aumentar los rendimientos, de manera tal de darle sustento económico al negocio agrícola.
Stoller posee en su cartera de soluciones a Sett®.
La forma más eficiente de aumentar los rendimientos de un cultivo -en este caso la soja-, pasa fundamentalmente por levantar los pisos de rendimiento en aquellos ambientes que pueden presentar problemas relacionados con déficits de elementos, como el Calcio. Este, junto con el Magnesio, son fundamentales en muchos procesos fisiológicos y su absorción no depende tanto de su presencia en el suelo, sino de su relación con otros cationes como el Potasio y el mismo Magnesio, donde las alteraciones en las relaciones pueden llevar a deficiencias relativas. Esto quiere decir que, habiendo suficiente cantidad de elemento en el suelo, el mismo no es absorbido por las plantas debido a sus interacciones con otros elementos.
El Calcio cumple muchas funciones en la planta, pero dos se destacan sobre las demás:
- Es el responsable de unir las diferentes células de un tejido, otorgándole fortaleza al mismo.
- Es el responsable del alargamiento del tubo polínico, dándole más velocidad de elongación y por lo tanto, aumentando la posibilidad de que ese grano de polen fije un grano.
Dado que es un elemento que se transporta dentro de la planta mediante el flujo masal de agua, su llegada a puntos extremos como brotes y flores depende del nivel de transpiración del cultivo. Si es baja debido a la poca disponibilidad hídrica en el perfil, el aporte del elemento por vía foliar permite llegar a puntos extremos de la planta mejorando la brotación y, por lo tanto, el índice de área foliar óptimo para el llenado de granos y también a los granos de polen de la flor, aumentando la posibilidad de cuajado de las mismas.