La carne argentina le gana a la Coca-cola
De acuerdo a un relevamiento realizado por el IPCVA, la carne vacuna tiene más fanáticos que la gaseosa más popular del mundo. También supera a otras marcas reconocidas y al mismísimo fernet en Córdoba.
Los publicistas suelen afirmar, más aún en estas épocas de video clip, que “la imagen es todo”, una forma de rizar el rizo, como dicen los españoles, de aquella otra sentencia que sostiene que “una imagen vale más que mil palabras”.
Algunos “marketineros” y comunicadores van más allá y coinciden en que si bien la “imagen” puede y debe trabajarse, está íntimamente vinculada al concepto de “reputación”, que es muy difícil de construir porque consiste en algo que nos atribuyen los demás.
Es decir, son los otros –los observadores, los usuarios, los votantes, los consumidores- quienes otorgan la reputación y eventualmente se fanatizan con un producto, persona, personalidad, institución, marca, etc.
La aclaración es más que válida para entrar con nuevos elementos en el viejo tema del fanatismo argentino por la carne vacuna, con algunos números que avalan que el asado le gana incluso a la coca-cola, una de las principales marcas del mundo.
Carne 1 – Coca 0
Una encuesta realizada por el Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (IPCVA) en Córdoba (octubre de 2017) demostró que la carne –siendo que se trata de un genérico- se impone por sobre marcas reconocidas, como la gaseosa mencionada (en el país del mundo que más gaseosa per cápita consume), La Serenísima, Marolio o Taragüí.
Incluso, pese a que el relevamiento se llevó a cabo en la provincia mediterránea, cuna del fanatismo por el fernet, la carne se impuso claramente a esa bebida que fanatiza especialmente a los cordobeses.
La muestra estuvo integrada por 200 encuestas, y se trató de un público preponderantemente masculino (70% hombres y 30% mujeres), con una segmentación conformada en un 54% por edades comprendidas entre 18 a 30 años, en un 38% por edades entre 31 y 60 años, y en un 8% 61 años o más.