Recomendaciones para el manejo nutricional de la soja
Con una dosis adecuada de fertilizantes se pueden multiplicar los rindes y obtener altas ganancias por hectárea en una sola campaña.
Fertilizar convocó a la charla ‘Un año para desafiar a la soja’.
Fertilizar AC hizo un llamado a los productores y técnicos de Argentina sobre las posibilidades de aumentar los rendimientos de la soja, los cuales se mantienen “estancados” en los últimos 15 años, a pesar de que “tenemos las tecnologías disponibles para mejorarlos sustancialmente”, según aseguró la gerente ejecutiva de la entidad, María Fernanda González Sanjuan.
“La otra variable que permanece planchada en la soja es el nivel de las dosis de fertilizantes empleados. Después de 2015 que fue un año bisagra para la nutrición de cultivos por el escaso uso de la fertilización, la soja no reaccionó. Por eso creemos que hay una oportunidad de manejo de la tecnología que estamos desaprovechando como productores agrícolas y como país”, dijo González Sanjuan.
Con esta premisa, Fertilizar convocó a la charla ‘Un año para desafiar a la soja’ con la participación del Jefe de Agencia del INTA 9 de Julio, Luis Ventimiglia y el vicepresidente de la asociación, Jorge Bassi.
Cambiando la dosis
Según los números de Fertilizar, el productor de soja aplica unos 50 kilos en promedio de fertilizantes con fósforo y azufre (P y S) con los cuales logra entre 3.000 y 4.000 kilos de soja por hectárea. “Pero en estos años los suelos se deterioraron y aumentaron los potenciales de respuesta”, advirtió el vicepresidente de Fertilizar, Jorge Bassi. “No estamos explorando el salto; estamos estancados en rendimientos promedio. Hoy hay mucho más dinero por generar en una hectárea de soja. Aunque el ‘testigo’ parezca razonable, se está perdiendo el salto de rendimiento”.
El paulatino deterioro de los suelos por extracción de nutrientes y la mejora potencial del rendimiento están generando cambios en los parámetros de las recomendaciones. “Ahora, con las dosis que trabajamos para lograr altos rendimientos, que representan 30 kilos de fósforo y 16 de azufre, logramos una ganancia de 639 kilos por hectárea, que significa un margen de 72 dólares/ha frente al testigo”.
“El productor está utilizando las recomendaciones que generamos hace 15 años, pero nuestra actual recomendación genera mejores resultados y están probadas con un serio trabajo de ensayos con resultados contundentes. Tenemos la oportunidad de aumentar rendimiento con buena rentabilidad, necesitamos hacer un cambio profundo que empieza por las propias pruebas de campo del productor”.
Bassi describió que “en Argentina tenemos 9 millones/ha de soja sembradas en lotes con bajos contenidos de fósforo y por lo tanto en condiciones de mejorar su manejo. Si aplicamos la tecnología propuesta de fertilizantes (30 P y 16 S) el país obtendría 5,6 millones de toneladas más por año, con el agregado de haber sostenido y mejorado la calidad del grano (% de proteína), y mejorando también el balance de nutrientes que hoy es altamente deficitario.”.
Un nuevo dato de las deficiencias en la nutrición, se generó al analizar un número importante de muestras foliares de la región pampeana, los mismos indicaron que a través del análisis foliar de la soja la presencia de nitrógeno era normal pero en P era bajo en el 52% de las muestras analizadas, y 31% bajo en S.
Relación insumo producto
El directivo informó que la relación insumo/producto para esta campaña 2018/19 es de 2,97 (“con 3 kilos de soja pago un kilo de fertilizante fosfatado”), la cual sigue favorable a pesar que cayó respecto a la campaña anterior (2,56, en 2017).
“Hoy, la respuesta a la fertilización de soja es contundente y generalizada. Debemos aplicar el paquete completo de fertilización ya que la soja responde al apilado de nutriente. Si buscando ahorrar, no aplicamos los nutrientes balanceados, le daremos erraticidad a la respuesta”.
Bassi compartió las recomendaciones para el manejo de la nutrición en soja en el que el paquete nutricional debería ser el siguiente: