La escuela rural que puede ganar un millón de pesos por su compromiso con la salud

La Escuela Nro 35, Mapis, es una de las 10 finalistas del premio “Maestros Argentinos”, por su proyecto de prevención y concientización para erradicar una peligrosa zoonosis endémica en la zona rural de Olavarría.

26deOctubrede2018a las08:45

Una capilla, un club, una vieja estación ferroviaria donde ya no pasa el tren, es lo único que rodea a la Escuela rural Nro 35, Mapis, que se encuentra a 130 km de Olavarría, la cabecera del distrito, lejos de toda urbanización.

La escuela tiene 11 alumnos en primaria y 6 en el jardín. Silvana Anaurdo, su directora, trabaja como personal único, dando clases a alumnos de 1ero a 6to en un mismo salón, en un pluriaño, que cuenta además con docentes de áreas especiales que van solo una vez por semana.

“Enseñar en la escuela rural es lo más enriquecedor que puede haber. Se genera un intercambio muy valioso con los alumnos porque, al trabajar todos en el mismo salón, los alumnos que ya saben enseñan a los otros, se recuperan saberes previos. El chico siempre vuelve siempre a lo que aprendió”, cuenta la directora.

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Una señal de alarma

En 2014, hubo un caso de zoonosis en la zona. Un de empleado rural de un campo cercano falleció por carbunco, una enfermedad infecciosa transmitida por , y en los suelos, donde se encuentra en forma de espora. Este caso encendió las alarmas y a la directora se le ocurrió comenzar a trabajar con la comunidad para concientizar del peligro que pueden ocasionar este tipo de enfermedades.

“Estamos muy solos por eso es muy importante hacernos escuchar, trabajar con propuestas innovadoras y que estén siempre relacionadas con la comunidad y los organismos. No todo se aprende en la escuela, ahí no están todos los saberes, hay que salir”, expresó la directora y contó que a partir de ahí organizaron la primera jornada de zoonosis, con la Dirección de Zoonosis de la Provincia, y con la UNICEN, Universidad del Centro de Tandil, con profesionales de veterinaria y medicina.

“Participó toda la comunidad, alumnos, padres. Trabajamos un día completo donde se informó cada una de las zoonosis a través de postas, se hicieron juegos para niños y adultos y extracciones de sangre para analizar si alguno tenía leptospirosis”, contó Anaurdo, quien trabaja en la dirección de la escuela desde 2009.