Rio Paraná: las impactantes imágenes de la mayor sequía en 77 años
El pico inferior de la bajante se espera entre mediados de octubre y noviembre de 2021, pero se prevé que los valores no alcancen los límites registrados en 1944
La Oficina de Riesgo Agropecuario (ORA) repasó que los niveles de los ríos se encuentran en niveles bajos.Esto tiene que ver con que la evolución de las precipitaciones en los últimos 3 meses muestra la prevalencia de condiciones de sequía severa a extrema en este de Paraguay, Corrientes, Misiones, este de Formosa y en la región central de Brasil: "El área en sequía en el norte del país se extendió el último mes, incluyendo zonas hacia el centro de Corrientes y nuevas áreas en sequía leve en Formosa. Se mantiene el impacto en Misiones vinculado a sequía en diversas producciones agropecuarias, así como en tomas de agua", destaca ORA.
Según los escenarios planteados por el INA, el pico inferior de la bajante se espera entre mediados de octubre y noviembre de 2021, pero se prevé que los valores no alcancen los límites registrados en 1944.
En la actividad agropecuaria se identifica el mayor impacto sobre la pesca artesanal debido a la reducción en las capturas, el incremento de los costos de movilidad para acceder a lugares más distantes y la ruptura de las herramientas de trabajo. En la ganadería se observa merma de forraje, mal estado corporal de los rodeos en zonas de islas y pérdida de fuentes de agua. Además, se sostiene el impacto vinculado al transporte de granos y otros productos agropecuarios.
En tanto, en el Delta Inferior se observa un cambio significativo respecto a 2019 donde se observa menor superficie cubierta con agua: "Las alturas hidrométricas desde la estación Paraná hacia Ibicuy se sostienen por debajo del cero de la escala y se prevé que la tendencia descendente se sostenga".
Las empresas exportadoras advierten que la histórica bajante del Río Paraná provoca mayores costos operativos de exportación: "Enormes costos logísticos son reflejo de la peor bajante del Río Paraná, que también genera problemas en los embarques. Los buques no pueden salir con la carga completa y deben viajar a completar carga a los puertos del Sur, Necochea y/o Bahía Blanca, o a los puertos de Brasil. Esto ocasiona cargos extras no previstos que hoy son absorbidos por los exportadores. Y lo más grave, las pérdidas de carga a manos de exportadores de origen brasileño, por citar uno, y, en el caso de que esta situación persista, el origen argentino será castigado en precios por los mercados compradores", destaca Ciara-Cec.