El Gobierno modificó el fideicomiso del trigo por la sequía
Solo subsidiará un tipo de harina y busca disminuir el impacto de los precios en el consumidor

La Secretaría de Comercio Interior modificó el Fondo Estabilizador del Trigo Argentino (FETA) a través de la Resolución 319/2023. La medida se da ante el impacto de la sequía y la necesidad, según el Gobierno, de asistir al consumidor.
Hasta este viernes, el FETA subsidia la harina 000 en bolsa de 25 kg; harina 0000 en bolsa de 25 kg; harina 000 por tonelada; harina 0000 por tonelada; harina 000 calidad por tonelada; harina tapera por tonelada y el semolín por tonelada. A partir del 1 de abril pasará a subsidiar sólo la harina 000.
Esta decisión estuvo argumentada porque el escenario climático actual es desfavorable para la producción agrícola para el año 2023. Para sustentar esta oración, la resolución explica: “Con estimaciones que marcan una pérdida del 45 % de la producción de soja esperada al inicio de la campaña 2022/2023”.
Cabe destacar que la sequía también generó una menor producción de trigo en la campaña 2022 y sobre la próxima campaña la situación aún es incierta. Mientras tanto, el Gobierno busca a partir del fideicomiso la posibilidad de compensar la harina.
Para profundizar esta decisión ante un marco crítico, la secretaría decidió aumentar la transferencia interna sólo para la harina de segunda industrialización por parte de los destinatarios. De esta manera, se busca: “Garantizar un valor de referencia para el trigo en el mercado interno que permita conservar una estabilidad en la participación de la bolsa de harina como componente del costo de los productos que de esta se derivan”.
Además, la resolución destacó que el Estado implementó medidas de alivio fiscal para más de sesenta mil productores afectados por la sequía. “Resulta necesario adecuar ciertos aspectos a fin de que el escenario provocado tanto por la disminución de ingresos fiscales derivados de las exportaciones agropecuarias como también por los efectos en el mercado interno que genera la situación descripta, no impacte críticamente sobre el consumidor”, sostuvo la medida.
La resolución sostiene que la nueva modificación mejora las condiciones de acceso para los productos derivados de la molienda con mayor relevancia en la canasta de consumo de las familias argentinas. Por ello, resulta oportuno y necesario compensar únicamente las ventas de harina 000 y las de segunda industrialización que realicen los destinatarios que operan en el FETA.