Made in Argentina: la empresa santafesina que tendrá un rol clave en el resurgir de un ícono mundial de los autos deportivos
El acuerdo marca un paso inédito en lo que es la fabricación y puesta en marcha de estos modelos de autos; el dueño de la firma cuenta los detalles del proyecto
Con una trayectoria duradera en la cultura automotriz, el AC Cobra (popularmente conocido como Shelby Cobra), logró volverse un ícono clásico en la línea de autos deportivos a nivel mundial. Ahora, una empresa santafesina cumplirá un rol central para mantener su legado vivo el país. Se trata de Collino Motors, firma oriunda de la ciudad de Sunchales y especializada en la producción de autopartes en vehículos de competición y especiales. Sus directivos fueron convocados por Cobra Motorsport Argentina y trabajan en un proyecto de gran envergadura.
Colaboración con Cobra Motorsport Argentina
El ambicioso proyecto apunta a la fabricación de los chasis que luego irán destinados a equipar a los Cobra Motorsport, que Cobra produce en las instalaciones ubicadas en Pilar, Buenos Aires. Pero además, desde la planta de más 1800 m2 que Collino tiene al norte de Santa Fe, se armarán las estructuras para otros dos modelos de la compañía, que son el Bristol y el Daytona. Así, la nueva generación tendrá como plataforma el chasis diseñado de la mano de José Collino, quien está al frente de la empresa junto a su hermano Leo.
En diálogo con Agrofy News, este último ponderó el acuerdo con Cobra Argentina y destacó que actualmente ya despacharon tres estructuras de chasis CC-1 para los Cobra Motorsport. El primero fue entregado en el mes de marzo y el objetivo es llegar a fabricar y enviar hasta quince en los próximos cinco meses. Son más de 30 las personas que se encuentran implicadas en la iniciativa y la planta tiene una capacidad instalada que les permite llegar a 50 unidades por año.
“Nuestra experiencia en la fabricación de autopartes de alto rendimiento nos hizo desarrollar un conocimiento tal que al momento de arrancar no nos encontramos con nada nuevo, prácticamente estábamos preparados en lo técnico e incluso con la infraestructura y la tecnología para afrontar este nuevo desafío", señaló Leo, quien resaltó la figura de su hermano José como el "líder”, detrás del plan de desarrollo que se llevó a cabo en un “tiempo récord", de dos meses.
A su vez, destacó el diseño versátil y la capacidad de que los chasis sean industrializables a baja escala. “En general, hablar de procesos estandarizados conlleva tener la matricería y la moldería para hacerlo a una escala más grande. Nosotros logramos una estructura que funciona bien y que es fácil de producir en pocas unidades”, indicó Collino.