Maíz: la empresa protagonista de la mayor revolución del siglo

En un contexto donde la falta de precipitaciones no da tregua, el maíz tardío logró posicionarse como el gran caballito de batalla para los productores. Dos años seguidos de déficit hídrico y el retraso del tan esperado Niño, han impulsado el replanteo agronómico, priorizando la elección de híbridos precoces. Estos, no solo se destacan por su excelente rendimiento, sino también por la capacidad de liberar los lotes de manera anticipada. Actualmente, se estima que el 60% de las áreas de cultivo en todo el territorio nacional se dedican al maíz tardío.

Stine Semillas: pionero en maíces cortos y maíces petisos

El auge de este cultivo plantea un desafío adicional para los productores: elegir en un mercado saturado, donde es crucial optar por una marca con trayectoria en investigación que garantice el rendimiento. STINE Semillas, se destaca como la pionera en este tipo de híbridos, una categoría en la que otras semilleras recién comienzan a incursionar. Este liderazgo se atribuye a la importancia que la compañía otorga a la investigación desde sus inicios. El programa HP (High Population), desarrollado por Harry Stine a principios de los 70, reveló que en entornos de alta densidad, las plantas de menor estatura y porte tienden a funcionar mejor debido a un uso más eficiente del espacio y recursos disponibles (mayor estrés). Este hallazgo coronó a STINE Semillas como la pionera de este tipo de híbridos.

Encabezando el amplio portafolio de la marca se encuentran el ST 9820 Viptera 3 de la familia de los Petisos; los Cortos ST 9734 Viptera 3, el ST 9736 Cl Viptera 3 y ST 9741 Viptera 3, y el 9905 Viptera 3, apodado "Bestia Corta", que destaca por su gran estabilidad.