Cerealeras: un mundo de millones, misterio y poder
Cargill avanzósilenciosamente y ya es la principal exportadora de la cosecha argentina. Hayotros grupos que desplazan a cooperativas y firmas locales SILVIA NAISHTAT Pese a que comercian el más público de losbienes, los granos que alimentan el mundo, el misterio rodeó siempre alas grandes exportadoras de cereales.
Las llamadas cinco hermanas, Cargill, Dreyfus, Bunge y Born, Andre y ADM, queestán en todo el planeta, tienen una verdadera pasión por la privacidad. Y elestilo se exagera en momentos difíciles como el actual, donde deben moverse enun escenario de precios bajos y pelear entre todas en todos lados.
En los últimos dos años el empuje silencioso de la estadounidenseCargill, que compró a Continental, de la familia Fribourg de EE.UU., laconvirtió en la Argentina en la indiscutida número uno. Es la mismaposición de liderazgo que ostenta en el mundo, donde factura unos 60.000millones anuales.
Cargill se asoció aquí con Molinos en la firma Trigalia, creando un giganteen el negocio de la harina de trigo.
En este rubro, algunos de los que se lanzaron a la aventura de exportar y fueronestrellas en los 80 durante el comercio con la entonces Unión Soviética, comoGenaro García, desaparecieron de escena frente a este coloso con unacompleja organización internacional.
Pero no todo lo que brilla es oro. En la Bolsa de Cereales comentaron queCargill debe vérselas con otros exportadores en carrera ascendente comoTradigrain, manejada por el ex Plata Cereal David Vázquez.
Tradigrain, con sede en Ginebra, pertenecía al mítico Gerald Embler, amigo delos rusos en tiempos del embargo cerealero decretado en 1980 por el presidenteCarter en reprimenda a Moscú por la ocupación de Afganistán. Luego fuevendida a Gaith Pharaon, el dueño del hotel Haytt en la Argentina y procesadopor supuesto lavado de dinero por la Justicia a raíz del escándalo con subanco BCCI. Pharaon la traspasó enseguida a la British Petroleum, que luego latransfirió a una cooperativa de granjeros estadounidenses. Tradigrain estácreciendo en la Argentina: reina en el comercio de trigo con Brasil ycontrola casi el 13% de las exportaciones del cereal.
Otro riesgo para Cargill, según sus competidores, es ADM, recién aterrizada.Se trata de la segunda del ranking estadounidense. ADM ya tiene la mitad deToepfer, una de las mayores exportadoras de aceite. Y contrató a Alex Ingham,ex cerebro de Continental, quien suele asegurar que ADM vino por más,"para pisar fuerte, muy fuerte".
Entre los nuevos jugadores figura Glencore, la flamante dueña de OleaginosaMoreno, que es la sexta en importancia entre los exportadores de soja y lanovena en el caso del trigo. Glencore le arrancó a Cargill su comprador,Guillermo Goin. hasta Dreyfus, con el corazón en París, sexto en el ranking deexportadores de maíz y quinto en el de soja, se tornó más agresivadespués que el argelino Moris Toledano fue reemplazado por Tomás Inchausti, unex Productos Sudamericanos y considerado un ejecutivo con mucho empuje. Un push,según el mercado. Productos Sudamericanos, dirigido por Lucio Mander, es a suvez el primero en las exportaciones de girasol.
Todos estos grupos brotaron con la retirada de otros. La cooperativa Faca, quedio el salto cuando se privatizaron silos y puertos, a comienzos de los 90, hoyestá en convocatoria de acreedores.
Nidera, una multi considerada a