La frontera seguirá abierta
ASUNCION.- La Argentina y Paraguay tomaron la decisión de realizar acciones conjuntas para eliminar los contratiempos creados por la aparición de un foco de aftosa en la zona de Canendiyú, y prevén la ejecución de medidas inmediatas para resolver el problema sanitario y evitar los efectos económicos que generaría otra alarma en el mercado mundial de carnes.
Con ese objetivo, representantes de ambos países acordaron consolidar un sistema de vigilancia epidemiológica en el marco del Plan Hemisférico de Erradicación de la Fiebre Aftosa y fortalecer el sistema de comunicación de frontera entre los servicios veterinarios oficiales en el nivel local de ambos países.
Las reuniones se llevaron a cabo en la Asociación Rural del Paraguay y contaron con la presencia argentina del gobernador de Formosa, Gildo Insfrán; el secretario de Agricultura, Haroldo Lebed; el presidente del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), Bernardo Cané, y el presidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA), Luciano Miguens.
Se tomó la decisión de encarar acciones conjuntas con Paraguay para superar lo antes posible la situación creada en Canendiyú, en la frontera con Brasil, donde se aplicó el rifle sanitario a 719 cabezas, y la vacunación inmediata de otras 600.000.
Lebed dijo que tenía instrucciones del presidente Eduardo Duhalde de apoyar técnica y, de ser necesario, económicamente al vecino país para que supere el episodio.
Pero, al mismo tiempo, hizo notar que el comportamiento oficial tiene la finalidad esencial de preservar la sanidad animal en la Argentina para mantener intactos los mercados que se han recuperado y avanzar en el reingreso de otros, como es el caso de los Estados Unidos.
Trabajo en equipo
La delegación argentina se manifestó en favor de mantener la frontera abierta y se inclinó por la opción de trabajar en conjunto. Esta posición fue impulsada por Insfrán, aunque la SRA había "exigido" la clausura inmediata del paso, una semana atrás. Se buscará la forma de que los técnicos de los organismos sanitarios de ambos países puedan trabajar en los dos territorios y de manera coordinada.
"Deben comprender la inquietud de nuestros productores y, aunque estamos de acuerdo en que hay que trabajar en conjunto, opinaremos cuando los organismos técnicos informen con precisión sobre si los distintos productos que atraviesan la frontera están ajustados a las normas establecidas por los organismos internacionales", aclaró el titular de la SRA.
"El foco está lejos de la frontera con la Argentina. Pero aún no sabemos bien lo que está pasando en Paraguay, y sólo estaremos tranquilos cuando haya un informe técnico claro y transparente", agregó Miguens al tiempo que recordó que la vacunación antiaftósica en la Argentina todavía no se completó y, por lo tanto, no se puede correr riesgo alguno.
El ministro paraguayo de Agricultura y Ganadería pidió a los productores argentinos que no tengan temores, ya que se está trabajando con responsabilidad y porque el foco está acotado a Canendiyú.
De todos modos, la diferencia de precios, según publicó ayer el diario Ultima Hora de Paraguay, provocó un contrabando masivo de animales hacia Brasil pese a las rigurosas medidas que instrumentó ese país para el control de las fronteras. Un empresario paraguayo denunció, según el diario, que los brasileños están comprando reses en Paraguay atraídos por la baja de precios y pese a la aparición de aftosa.
Enviado especial