La noche del 19 de diciembre
La noche del 19 de diciembre tal vez sea recordada como un punto de inflexión en la historia argentina. Esa noche el entonces presidente Fernando De la Rúa anunció la declaración del estado de sitio, como consecuencia de actos de violencia producidos en varios puntos del país en protesta por las medidas económicas dispuestas por el gobierno.
Apenas terminó de pronunciarse el discurso, comenzaron a escucharse en todas partes las primeras reacciones de la gente. En los balcones, en las puertas de las casas, en las veredas, niños, ancianos, hombres y mujeres comenzaron una anónima manifestación de descontento. Fundamentalmente se usaron cacerolas, que en medio de esa noche tensa sonaron como una combinación de protesta y celebración. Protesta por sentirse desbordados por tanto abuso; celebración, porque se generó un sentimiento casi mágico de que esa noche se acababa todo; que el tañir de las cacerolas daría el golpe final a un gobierno que se caía solo por obra de su propia ineptitud.