Pérdidas millonarias por la sequía en Francia

El sector agrícola francés podría sufrir unas pérdidas de mil millones de euros en esta campaña por la fuerte sequía que azota al país, según cálculos publicados hoy por la prensa local

13deAgostode2003a las08:32
Aunque oficialmente no se ha adelantado ninguna cifra de pérdidas, el diario "Le Figaro" indica que la cantidad que manejan las organizaciones agrícolas es de mil millones de euros.

Los más afectados son los ganaderos, que están viendo como el forraje necesario para la alimentación de las vacas empieza a escasear, a lo que hay que sumar los problemas de abastecimiento de agua, pues la sequía ha acabado con muchos acuíferos naturales.

La escasez de forraje podría provocar que muchos ganaderos pongan a la venta los animales antes de tiempo, lo que a su vez redundaría en una mayor cantidad de carne en el mercado y en un descenso del precio.

Los productores de cerdos y pollos han registrado un incremento de las bajas unidas al fuerte calor. La Confederación Francesa de Avicultura calcula en un millón y medio el número de aves fallecidas desde que la pasada semana se inició la ola de calor.

En cuanto a los agricultores cerealistas, las pérdidas en la producción se calculan en un 20 por ciento, una cifra que puede llegar al 50 por ciento en algunas regiones.

Para paliar los efectos de la sequía, el Gobierno podría desbloquear 300 millones de euros a través del Fondo de Garantía para Calamidades Agrícolas (FNGCA), que debe cubrir también las pérdidas provocadas por las heladas invernales.

Por el momento, 55 departamentos han mostrado su intención de reclamar dinero de este fondo para paliar los efectos de la crisis.

El primer ministro, Jean-Pierre Raffarin, se reunirá el próximo día 22 con el Consejo de la Agricultura francesa, que agrupa a los profesionales del sector.

Frente a las quejas de la mayoría de los agricultores, los productores de fruta y los vinateros esperan que la sequía redunde en un incremento de la calidad de sus productos.

En el caso de la uva, los profesionales del sector creen que la añada será excepcional, por lo que muchos han aventurado un vino de calidad formidable comparable al que se obtuvo en 1947.

De hecho, la vendimia ha comenzado ya en varias regiones francesas, con tres semanas de adelanto respecto a campañas anteriores.