¿Es necesario el uso de curasemillas fungicidas en el cultivo de trigo?

La respuesta a esta pregunta la trataremos de dar en el presente artículo técnico, pero primero seria importante que analizáramos que ocurre con las semillas, los patógenos y el suelo, antes y después de la siembra.

16deAgostode2005a las09:00
La respuesta a esta pregunta la trataremos de dar en el presente artículo técnico, pero primero seria importante que analizáramos que ocurre con las semillas, los patógenos y el suelo, antes y después de la siembra.

Sin lugar a dudas, las semillas de trigo en la mayoría de los casos, traen consigo una carga de patógenos que debe ser controlada y que muchas veces no es detectada en las determinaciones rutinarias de poder germinativo. Por lo tanto, el curado con fitoterápicos nos permite eliminar los organismos que afectan la germinación de nuestra semilla y evitar la introducción de nuevos patógenos en el suelo.

En segundo lugar, el suelo donde implantamos las semillas no es un medio estéril sino por el contrario esta poblado por numerosas poblaciones de patógenos, altamente adaptadas al medio donde viven, que atacan a las semillas de trigo durante la etapa que va desde la germinación hasta la emergencia de los cultivos. Este ataque es aun mas pronunciado e importante cuando existen condiciones agroclimáticas que favorecen a los patógenos como suelos húmedos, fríos y con cobertura de rastrojo que hacen que los períodos de germinación y emergencia se prolonguen y por lo tanto las posibilidades de ataques a las semillas aumentan considerablemente.

Consecuentemente, si a los patógenos presentes en la semilla le adicionamos los que pueden atacarla desde el suelo, tenemos una importante población de organismos perjudiciales que es necesario controlar, a los efectos de obtener una adecuada germinación de las semillas y con ella una correcta implantación de las plántulas para así lograr un stand de plantas agronómicamente optimo.