En el campo, el mercado es el que manda.

—El Gobierno insiste en que al campo "le va bien". Pero la FAA reclamó al Congreso la sanción de más de veinte leyes para pequeños productores. ¿Cómo se entiende?

—En el agro, como en cualquier otro sector económico, hay diferentes escalas. Y a los pequeños y medianos productores actualmente se les complica mucho su inserción en el mercado. Por eso decimos que el sector debe ser objeto de una política diferencial por parte del Estado, como sucede con las Pymes industriales.

—¿No existen esas políticas diferenciales?