Forrajes, genética y bienestar animal
El INTA presenta un paquete de innovaciones para intensificar y mejorar la producción de carne y leche vacunas.
Forrajes conservados, cuidado del bienestar animal, mejoramiento de la genética, adopción de herramientas de precisión. Todas estas propuestas forman parte de un paquete de innovaciones que el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) presenta en Expoagro para que el ganadero pueda intensificar racionalmente su producción. El propósito no es otro que el aumento de la cantidad y de la calidad de la carne y, en consecuencia, de la rentabilidad.
Con esta meta en el horizonte, desde el INTA Manfredi trabajan en el Proyecto Nacional de Forrajes Conservados cuyos resultados son estimulantes. "Con este sistema se pueden producir 2000 kilos de carne por hectárea, mientras que con otro se llega a 100 o 200 kilos", afirmó Marcelo De León, coordinador del proyecto. Para vacas lecheras, se pasaría de producir 20 litros de leche por día a 25 o 28.
El secreto para hacer un buen forraje conservado está en la calidad de la materia prima. "Surge de un cultivo de maíz y de sorgo de alta calidad", dijo De León. Además, la confección del silaje debe ser óptima, por eso debe estar adecuadamente compactado y en ausencia de oxígeno. El costo de cada kilo de esta materia seca es de 12 centavos de dólar.