Siguen planchadas las exportaciones argentinas de lácteos por la política de autorregulación empresaria

A pesar de que los precios internacionales vienen recuperándose de manera notable, las principales usinas limitan los envíos realizados al exterior para evitar interferencias oficiales.

31deMarzode2010a las16:34

Las ventas externas de productos lácteos argentinos siguen planchadas a partir de la política de autorregulación de exportaciones implementada por las principales usinas locales con el propósito de evitar nuevas intervenciones oficiales.

 

Si bien en el primer bimestre del año la industria argentina cuenta con un potencial de exportación del orden de las 80.000 toneladas de productos lácteos –tal como ocurrió durante enero y febrero 2007–, en los dos primeros meses de este año las ventas externas de leches, quesos y derivados lácteos fueron de apenas 42.996 toneladas, según datos de los registros del Senasa (en el primer bimestre de 2009 habían sido de 45.734 toneladas).

 

Los precios en el mercado internacional de lácteos comenzaron a recuperarse de manera notable en los últimos meses. Pero los administradores de las principales usinas exportadoras –luego del descalabro intervencionista registrado en 2007 y 2008– prefieren a partir del año pasado asegurar un determinado volumen mínimo (una suerte de “cupo privado de exportación”) que aventurarse a incrementar los envíos y llamar la atención del secretario de Comercio Interior Guillermo Moreno.

 

“La Argentina priorizó el abastecimiento del mercado interno, por lo que muchos de los productos lácteos se volcaron al consumo local”, indicó hoy a Infocampo.com.ar Miguel Paulón, presidente del Centro de la Industria Lechera (CIL).