Anticipan quebrantos para el trigo
En una asamblea en la provincia, Carbap dijo que el cultivo ya no es negocio para el productor; críticas al nuevo sistema de comercialización.
Mientras la mayoría de los argentinos se preparaba para celebrar las fiestas navideñas, el jueves pasado los productores de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap) se reunían en Pigüé, en un ambiente de mucho enojo. Es que, según las autoridades de la entidad, con los actuales precios, el nivel de retenciones y la distorsión en la comercialización, el cereal dista de ser negocio en la provincia de Buenos Aires.
"Los productores nos pidieron que Carbap aconseje no sembrar trigo en la próxima campaña. Nosotros creemos que eso no se debe hacer, pero sí les estamos diciendo a nuestros afiliados que si apuestan por el cereal arrancan con fuertes pérdidas por hectárea", destacó Alberto Frola, presidente de Carbap y encargado de presidir la asamblea de Pigüé, donde los trigueros eran puro enojo y críticas al Gobierno por la intervención al mercado del cereal.
"Hoy el trigo en el sudoeste de la provincia necesita 1800 kilos de rinde de indiferencia, y en la zona apenas se están sacando 1500 kilos. Va a haber muchos quebrantos", ejemplificó Frola.