Hasta la comida se compra en cuotas

Por la inflación, cada vez más personas se ven obligadas a financiarse.

03deSeptiembrede2012a las08:00

A simple vista, el cartel con la leyenda "Pagar con Visa tiene sus beneficios: 3 cuotas sin interés" no parece una gran novedad en una economía como la argentina, que en los últimos tiempos tuvo uno de sus ejes de crecimiento en el financiamiento al consumo.

Claro que todo cambia cuando se descubre que el afiche no está pegado en la vidriera de una cadena de electrodomésticos ni de una casa de ropa, sino en una sucursal de las carnicerías Avicar.

Este caso es apenas una muestra de que las compras en cuotas están llegando ahora también a los alimentos y a los productos de la canasta básica.

Los comerciantes de rubros de consumo masivo advierten que las operaciones con tarjetas en varios pagos están dejando de ser exclusivas de Garbarino o de los shopping centers: lentamente empiezan a asomar en rubros más ligados a la canasta básica, como los supermercados de barrio o incluso las carnicerías.

El crecimiento de las operaciones financiadas en cuotas es una consecuencia directa del efecto de la inflación en la vida cotidiana de los hogares argentinos, que en algunos casos ven en las tarjetas de crédito una oportunidad financiera -al aprovechar las cuotas sin interés que ofrecen los bancos a sus clientes-, y en otros, directamente, una herramienta para poder llegar a fin de mes.