El Ejecutivo presiona a sojeros para que liquiden u$s 3.000 M
Guillermo Moreno dará en las próximas horas una orden concreta: antes de que termine marzo, los exportadores sojeros deberán liquidarle al Gobierno unos u$s 3.000 millones, y otros u$s 5.000 antes de mayo.
Es dinero que se quiere tener en caja antes que comience lo más difícil del año fiscal, a partir de fines del primer semestre del año y cerca del año electoral. Se trata de los más importantes ingresos que el Gobierno podría obtener de las ventas de soja al exterior durante 2013, y que debe tributar al Ejecutivo el 35% vía retenciones.
Lo que se busca desde la Secretaría de Comercio Interior de Moreno, y desde su oficina subordinada, la Secretaría de Comercio Exterior de Beatriz Paglieri, es tener dominada rápidamente la variable más favorable de ingresos fiscales del Gobierno vinculada con las exportaciones, que trata simplemente de repetir la experiencia (no del todo positiva, por cierto) que el funcionario pergeñó para 2012 y que le permitió hacia mayo tener en caja el 75% de las liquidaciones de exportaciones de soja de todo el año. El problema, viendo el final de la película, es que esas ventas fueron concretadas no al mejor precio de cotización de la oleaginosa de 2012, que llegó a un récord de u$s 650 hacia septiembre pasado, sino a valores por debajo de los u$s 550 la tonelada. Para colmo, si los exportadores le hicieran caso a Moreno, el precio de liquidación, de mantenerse los valores actuales, rondarían los u$s 530 la tonelada. Si bien se prevé que mejoren, la verdad es que los valores están lejos de ser todo lo importantes que los productores esperan.