Más incertidumbre en Ucrania: el presidente da un paso al costado
Inesperadamente, el resistido Yanukovich pidió licencia por enfermedad por tiempo indefinido; eso paralizó las negociaciones para encontrar una salida al conflicto.
La crisis institucional que resquebraja a Ucrania se profundiza cada vez más. Mientras la oposición se niega a abandonar las barricadas y Rusia empieza a soltarle la mano, el presidente Viktor Yanukovich dio ayer un pequeño e inesperado paso al costado, al pedir licencia por enfermedad, lo que paralizó las negociaciones para encontrar una salida al conflicto.
Yanukovich, asediado por una ola de protestas desde hace dos meses, "está de baja médica después de que se le diagnosticara una afección respiratoria aguda, acompañada de fiebre alta", comunicó el gobierno en su página oficial.
El anuncio fue tomado con escepticismo por la oposición, que además rechazó la ley de amnistía para los manifestantes detenidos en las protestas. La norma, aprobada anteayer a última hora por el Parlamento, exigía que la oposición desocupara el centro de Kiev.
Pero los manifestantes se niegan a desalojar los edificios públicos, y por ahora no hay señales de solución de la crisis política, que empuja al país hacia una guerra civil.
Además, Yanukovich parece estar cada vez más aislado. Ayer, muchos consideraron que la licencia del mandatario podría ser un ardid para sacarlo del poder.
Incluso Moscú, que apoyó al gobierno de Yanukovich desde el principio de la crisis, anteayer se mostró más distante. El presidente ruso, Vladimir Putin, dijo que había que esperar "la formación de un nuevo gobierno" antes de continuar suministrando la ayuda económica de 15.000 millones de dólares.