La baja de impuestos no sería suficiente
Luis Zubizarreta advirtió que bajar temporalmente impuestos a la producción de biodiésel será favorable para el sector, aunque no solucionará dificultades.
El proyecto de ley para bajar temporalmente impuestos a la producción de biodiésel en Argentina favorecerá al sector tras sufrir el virtual cierre del mercado de la Unión Europea, aunque no solucionará sus dificultades, dijo el jefe de la cámara de biocombustibles del país, Luis Zubizarreta.
Los diputados argentinos aprobaron el miércoles el proyecto para reducir los impuestos de la producción de biodiésel mientras la UE continúe aplicando un elevado arancel a las compras del combustible de Argentina, al que acusa de dumping.
Según los expertos, la propuesta, que prevé eximir al biodiésel del pago de las tasas que paga el diésel local de origen fósil, no encontraría dificultades en el Senado.
Si bien la medida mitigará las graves pérdidas provocadas por la decisión del bloque europeo, no compensará la situación provocada por la UE y el Gobierno argentino también debería realizar más cambios en sus políticas para el sector, señaló Zubizarreta.
Antes de que la UE aplicara aranceles a las importaciones de biodiésel argentino, el país sudamericano era el principal comercializador internacional del biocombustible, pero luego sus embarques se derrumbaron.
"El proyecto es positivo porque esta ley nos equipara con el gasoil (diésel) que Argentina actualmente importa (para la generación de energía), que justamente está exento de estos impuestos. Nos interesa esta posibilidad de venderle a las generadoras", dijo a Reuters Zubizarreta, presidente de la Cámara Argentina de Biocombustibles (Carbio).
"Es una buena noticia, pero suma un volumen (de demanda local) que no compensa lo que se perdió del mercado europeo", agregó el titular de la entidad que agrupa a las principales empresas elaboradoras del producto en Argentina, como Cargill , Bunge y Louis Dreyfus.